En las últimas horas, una misión humanitaria de la Defensoría del Pueblo, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Misión de Verificación de las Naciones Unidas (ONU) y la guardia campesina de la región, facilitó la liberación de Yonier Libardo Montero Zambrano, que se encontraba en poder del frente Jaime Martínez de las disidencias de las FARC desde hace cuatro meses.
La liberación de Montero Zambrano se produjo en zona montañosa cercana al municipio de Jamundí, en el límite entre los departamentos del Cauca y Valle del Cauca.
Las diferentes organizaciones acompañaron la recepción de Yonier Montero, un joven de 19 años, que había sido retenido por uno de los frentes de las disidencias de las FARC que operan en la zona.
Asimismo, adelantaron las labores humanitarias de verificación de sus condiciones de derechos humanos para garantizar el regreso a su hogar.
Las primeras informaciones indican que Yonier Libardo Montero Zambrano había sido retenido en el municipio de Cajibío, departamento del Cauca, en el mes de agosto del presente año por el frente Jaime Martínez.
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En el comunicado en el que informan de la liberación de Yonier Libardo Montero Zambrano, las disidencias de las FARC lo señalan de paramilitar.
“Fue capturado por nuestras unidades mientras desarrollaba labores de inteligencia a las unidades encargadas de un puesto de control. Situación que se da en un contexto de amenazas, tensiones, ataques armados y reactivación visible de la coordinación de las actividades paramilitares desde el corregimiento de Ortega-Cajibío”, dice el comunicado de las disidencias.
Desde la Defensoría del Pueblo se explicó que una vez liberado se contactó a la familia de Yonier Montero para programar el reencuentro y el regreso a su hogar. El joven manifestó que durante los cuatro meses de su retención recibió un buen trato y condiciones dignas de alimentación y salud.
Por su parte, el grupo armado ilegal manifestó, en el acto de entrega del ciudadano, que se trata de “un gesto de buena voluntad y una acción humanitaria, que da cuenta de nuestra disposición para participar en los diálogos de paz que el Gobierno nacional ha anunciado”.
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En la misión humanitaria, Kian Abbassian, jefe de la Subdelegación del CICR para el suroccidente del país expresó que:
“Las partes en conflicto deben proteger la vida y la dignidad de las personas que no participan o que han dejado de participar en las hostilidades y deben tratarlas con humanidad en toda circunstancia. En ese contexto, saludamos el gesto humanitario del grupo armado al entregarnos a esta persona para que pueda reencontrarse con su familia”.
En lo corrido del año, 61 personas han sido entregadas por diversos actores armados al CICR. “En las liberaciones cumplimos un rol estrictamente humanitario como intermediario neutral, en razón a ello no hacemos referencia pública sobre las circunstancias en las que pudo darse la privación de libertad de la persona entregada ni revelamos información que pueda afectar su seguridad”, aseguró Abbassian.
Hay que señalar que las disidencias de las antiguas FARC anunciaron el sábado 24 de diciembre un cese al fuego en todo el país. La medida irá hasta el 7 de enero de 2023.
“De carácter unilateral, decretar cese al fuego contra las Fuerza Militares y de Policía en nuestras áreas de operaciones a partir de la 06:00 horas del día 24 de diciembre del presente año, hasta las 06:00 horas del día 7 de enero del 2023, nos reservamos el derecho de defender la vida y la región de la agresión de otros actores ajenos a la fuerza pública del Estado”, afirmó el vocero de la disidencias.
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