Renunció el subdirector del ICBF, Juan Carlos Urrutia

La renuncia del funcionario, que se posesionó el pasado 14 de octubre, fue aceptada a través de la resolución 6030 con fecha del martes 27 de diciembre y firmada por el secretario general de la entidad, Josá Antonio Ramírez Parrado

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Hasta el momento no se conocen las razones de su renuncia. Foto: ICBF, Twitter.
Hasta el momento no se conocen las razones de su renuncia. Foto: ICBF, Twitter.

En la tarde del 28 de diciembre se conoció que el subdirector del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Juan Carlos Urrutia, presentó su renuncia a la entidad, en medio de la polémica en la que esta se ha visto envuelta en los últimos meses. Los motivos de su decisión de apartarse del ICBF, al cierre de esta nota, son desconocidos.

La renuncia de Urrutia, que se posesionó el pasado 14 de octubre, fue aceptada a través de la resolución 6030 con fecha del martes 27 de diciembre y firmada por el secretario general de la entidad, José Antonio Ramírez Parrado, que señaló esta está ajustada a los parámetros de ley.

De acuerdo con el perfil del exfuncionario, que está disponible en la página del ICBF, Urrutia es abogado de la Universidad de La Sabana y se especializó en Derecho Administrativo en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, y también en Contratación Estatal, en la Universidad de la Sabana. Tiene más de 30 años de experiencia laboral, trabajó en la Empresa de Energía de Bogotá, alcaldías de Chía, Zipaquirá, Nemocón, Guachetá, Tocancipá, la Agencia del Inspector General de Tributos Rentas y Contribuciones Parafiscales, la Central de Inversiones (CISA), entre otros.

A continuación se puede ver la resolución del ICBF en la que se acepta la renuncia de Urrutia:

Al cierre de esta nota se desconocen los motivos de la renuncia de Urrutia.
Al cierre de esta nota se desconocen los motivos de la renuncia de Urrutia.

La directora del ICBF denunció penalmente al operador Asociación Creemos en Ti

Baracaldo es citada para que responda por las irregularidades en su gestión como directora general del ICBF.
Foto vía: ICBF
Baracaldo es citada para que responda por las irregularidades en su gestión como directora general del ICBF. Foto vía: ICBF

En otras noticias relacionadas con la entidad, el 28 de diciembre, por medio de un comunicado, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) informó a la opinión pública que su directora, la cuestionada Concepción Barecaldo, denunció ante la Fiscalía General de la Nación al operador Asociación Creemos en Ti, debido a las presuntas irregularidades en la prestación de los servicios.

La decisión fue consecuencia de la investigación, en el marco del proceso administrativo con carácter sancionatorio, que fue adelantada al interior del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, en la que se probó que existió manejo inadecuado en los recursos por parte del operador.

“La transparencia es un valor irrestricto en mi administración. Ante las denuncias por presuntas irregularidades en el uso de los recursos de la niñez he solicitado a la Fiscalía iniciar las respectivas acciones penales a la Asociación Creemos en Ti y de encontrarse responsable, la reparación integral por los daños causados”, aseguro la doctora Concepción Baracaldo.

Entre los hallazgos evidenciados se encontraría apalancamientos monetarios y traslados no permitidos, así como la asignación de cargos y honorarios que no contaban con la aprobación del organismo. En consecuencia, desde el ICBF la Asociación Creemos en Ti fue sancionada con la suspensión de su licencia de funcionamiento. Este operador prestaba servicios para las regionales del Valle del Cauca, Boyacá, Cundinamarca y Bogotá.

“Durante la inspección también identificamos la asignación de cargos y honorarios que no fueron aprobados por el ICBF. Estás prácticas indebidas serán identificadas y sancionadas con vehemencia mientras esté en cabeza del ICBF”, puntualizó Baracaldo.

Así mismo, en el comunicado se afirma que desde la dirección del ICBF se insistirá en que los recursos destinados a la atención de los niños, niñas y adolescentes del país deben manejarse con total transparencia, pues de ello depende la eficiencia en su ejecución. Finalmente, se llamó a la ciudadanía a ejercer procesos de veeduría.

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