Alias Sebastián, uno de los cabecillas de Los Pelusos, fue asesinado mientras celebraba Navidad en Cúcuta

En las últimas horas se conoció la muerte de Frangil Antonio Rodríguez Vacca, conocido como alias Sebastián, el tercer cabecilla de Los Pelusos, una disidencia del extinto Ejército Popular de Liberación (EPL). Después de recibir un balazo durante una celebración navideña, el hombre estuvo 12 horas en el Hospital Universitario Erasmo Meoz de Cúcuta, en Norte de Santander.

El criminal de 45 años estaba en una reunión con sus familiares y amigos para celebrar la Navidad en una vivienda del barrio Buenos Aires. La fiesta inició el 24 de diciembre, pero se extendió hasta el día siguiente y a las 6:00 de la tarde, no hubo más razones para festejar. “Apenas escuchamos las detonaciones de los disparos, la música de los equipos de sonido se acabó y todo quedó en suspenso”, recordó uno de los habitantes del sector al diario La Opinión.

De acuerdo con el diario El Tiempo, un grupo de sicarios llegó en una moto Suzuki GN color negro y le dispararon indiscriminadamente a varias personas que estaban en la vivienda en el barrio Buenos Aires, en la ciudad fronteriza con Venezuela. Al centro médico no llegó solo alias Sebastián, sino que también recibieron atención médica Kelly Orlimar Roa Rivas, de 21 años, y Víctor Julio Romero Mejía, de 62.

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En el caso de Rodríguez Vacca, los médicos del hospital intentarlo salvarle la vida, pero por la gravedad de las heridas falleció a las 3:00 de la madrugada del 26 de diciembre. El medio de comunicación mencionado señaló que ese crimen puede “desatar una vendetta entre redes delincuenciales”.

Las autoridades están investigando las razones detrás del sicariato no solo de alias Sebastián, sino también de Víctor Julio Romero Mejía. Al parecer, el hombre que aún está bajo observación médica tiene antecedentes por fabricación, tráfico y porte de estupefacientes y estafa.

Han pasado 20 años desde que Frangil Rodríguez Vacca ingresó a las filas del EPL, una guerrilla que terminó desmovilizándose en la década de lo 90, pero que dejó algunas disidencias como la de Los Pelusos. Actualmente, alias Sebastián era reconocido como el zar de la extorsión en Norte de Santander y —según El Tiempo— era el hombre de confianza de alias Pepe, el segundo líder de la estructura criminal.

“La zona de injerencia de este delincuente está entre Tarra y Tibú, y se mueve mucho por la frontera con Venezuela”, le manifestó el coronel George Quintero, comandante de la Policía en Norte de Santander, al diario mencionado. Por órdenes de alias Pepe, el criminal recién fallecido estaba buscando “un acercamiento con una pequeña red de ‘Los Rastrojos’, que se encuentra en la zona, para enfrentar al ELN en ese lucha territorial que han venido librando, especialmente en Tibú”.

Aunque el zar de la extorsión tenía un gran poder y las autoridades le seguían la pista, había salido de prisión hace seis meses después de ser capturado en 2018. Tal como lo indicó La Opinión, las fiestas y el licor eran el talón de Aquiles de alias Sebastián, pues cuando celebraba los 15 años de la hija de uno de sus allegados, las autoridades lo capturaron en el barrio El Porvernir.

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