Cuatro jóvenes que permanecían en poder Segunda Marquetalia, una de las disidencias de la extinta guerrilla de las FARC, fueron puestos en libertad en zona rural de Tumaco, en el Pacífico nariñense, durante la mañana del viernes 23 de diciembre.
Tres de los liberados son adolescentes, dos de ellos de nacionalidad ecuatoriana, quienes fueron entregados a una comisión que conformaban delegados de la Defensoría del Pueblo y de sus homólogos del país hermano, del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), de la Personería de Tumaco y de la Iglesia Católica.
“Los tres menores de edad y un joven de 18 años estaban en poder del frente Iván Ríos de la Coordinadora Guerrillera del Pacífico, perteneciente a la Segunda Marquetalia, tras confrontaciones armadas en la zona”, indicaron en la Defensoría del Pueblo de Colombia.
Detallaron que los jóvenes terminaron en poder del grupo armado luego de los combates que sostuvieron con la columna móvil Urías Rondón del Frente 30 del Comando Coordinador de Occidente, otra de las disidencias de las FARC que se disputan a sangre y fuego las rentas ilegales en esa zona del país.
“La Defensoría del Pueblo reitera su disposición para disponer su capacidad institucional en todas las regiones del país para facilitar el retorno a sus hogares de todas las personas que están en poder de grupos armados ilegales”, agregaron en la entidad humanitaria.
Desde el CICR también celebraron que el mencionado grupo armado ilegal permitiera que los menores pudieran retornar con sus familias antes de Navidad.
“Las partes en conflicto deben proteger la vida y la dignidad de las personas que no participan o que han dejado de participar en las hostilidades y deben tratarlas con humanidad en toda circunstancia. En ese contexto, saludamos el gesto humanitario del grupo armado al entregarnos a estas personas para que puedan reencontrarse con sus familias”, afirmó Michele Arisi, jefe de la oficina del organismo multilateral en Pasto.
Una vez recuperaron la libertad los jóvenes fueron atendidos por personal médico que verificó que se encontraban en buen estado de salud y de esta manera trasladarlos a sus hogares.
“En las liberaciones cumplimos un rol estrictamente humanitario como intermediario neutral, en razón a ello no hacemos referencia pública sobre las circunstancias en las que pudo darse la privación de libertad de las personas entregadas ni revelamos información que pueda afectar su seguridad“, explicó Arisi.
El CICR informó que durante el 2022 han sido garantes en los procesos humanitarios con los que han sido puestos en libertad 60 personas que estuvieron en poder de grupos armados ilegales en Colombia.
“Estos estrictos protocolos garantizan la neutralidad, independencia, imparcialidad y confidencialidad con la que trabajamos y nos permite seguir ayudando a quienes se ven afectados por los conflictos armados y la violencia”, indicó la funcionaria del CICR.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo celebró que se sigan dando estos procesos que sirven como un indicador del cese de la violencia por parte de esas estructuras al margen de la ley.
“Se reitera el llamado a todos los grupos armados ilegales para que sigan dando gestos de reconciliación (...) que recobran una mayor importancia en esta época de fin de año en la que el país requiere de muchos más gestos de paz, y que demuestran la intención real para para avanzar de manera decidida en los diálogos que propone el gobierno Nacional”, afirmaron.
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