Los consejeros de Juventud deberían ser los primeros beneficiarios del programa Jóvenes en Paz, aseguró la Defensoría

El Gobierno nacional anunció el nuevo programa Jóvenes en Paz, el cual empezará el 1 de enero de 2023 y destinará un millón de pesos mensuales para más de 100.000 personas en Colombia. La Defensoría del Pueblo hizo un llamado para que los primeros beneficiarios sean aquellos que fueron elegidos como para las Consejerías de Juventud en diciembre de 2021.

El líder del órgano de control, Carlos Camargo, manifestó que si los consejeros de Juventud hicieran parte de la iniciativa, se reconocería “la legitimidad de su representación democrática” y así le apostarían a sus propuestas para “construir paz desde los territorios”. Asimismo, la Defensoría señaló en un comunicado de prensa que se garantizaría un “proceso de construcción de política pública que refleje la pluralidad y la capacidad de construcción de consensos”.

Para el defensor del Pueblo, “estos jóvenes, elegidos con un mandato popular, legal y ciudadano, son los llamados a representar los liderazgos sociales y comunitarios”. El funcionario recordó que, después de las exigencias de la población durante el paro nacional, las personas entre 14 y 28 años acudieron a las urnas para escoger a 12.874 consejeros de Juventud, integrantes de los Consejos Locales y Municipales de Juventud.

La Defensoría indicó que entre las funciones de los consejeros está: la inclusión de las agendas territoriales y nacionales de las juventudes con las respectivas autoridades; ejercer veeduría y control social, y actuar como mecanismo de interlocución y concertación ante la administración en los asuntos que les afecten.

“En cumplimiento de nuestro mandato, desde la Defensoría del Pueblo continuaremos facilitando espacios de encuentro y concertación entre los movimientos juveniles y el Gobierno nacional”, puntualizó el funcionario. El propósito de esas acciones es garantizar los derechos de las juventudes y “el fortalecimiento de los espacios y mecanismos de participación dispuestos en la Constitución y la Ley”.

El objetivo de este plan es evitar que jóvenes sean reclutados por organizaciones armadas al margen de la ley. “Vamos a intentar que 1.500 jóvenes ingresen al programa en esta región (el Catatumbo)”, indicó el presidente Gustavo Petro en El Tarra, Norte de Santander, destacó que aquellos que estén en las zonas más vulnerables del país se encargarán de ser gestores de paz, con beneficios económicos y educativos.

Respecto a los recursos para implementar el programa de Jóvenes en Paz, el ministro del Interior, Alfonso Prada, anunció que ese dinero saldrá de “cooperación internacional”. A su vez, la entidad encargada de formar a los jóvenes con las habilidades que necesitan será el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).

En una entrevista con W Radio, Gabriela Posso Restrepo, la consejera para la juventud, dio una explicación sobre cómo funcionará este apoyo económico: “En términos educativos porque muchos jóvenes no han terminado su proceso de educación media y eso lo estamos evaluando para que lo puedan terminar”. Seguido a ello, comentó que harán un trabajo de voluntariado en diferentes temas como gestores de convivencia, en procesos medioambientales, apoyo a su comunidad”.

Posso Restrepo aclaró que el programa no es infinito. “No es que un joven reciba el apoyo por mucho tiempo y ya está, sino que, por el contrario, es un apoyo condicionado en cumplimiento educativo, trabajo voluntario”, agregó al medio de comunicación.

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