Joven fue desmembrada en inquilinato en Medellín

Un fuerte olor que provenía de una habitación de un inquilinato del barrio Buenos Aires, en la ciudad de Medellín, alertó a los vecinos de que algo no andaba bien en el lugar, tras lo cual se pusieron en contacto con las autoridades.

El sábado alrededor del mediodía llegaron varios miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación al lugar de los hechos y se encontraron con el cuerpo de una joven de 21 años que fue identificada como Leidy Yohana Escobar Pulido. Con signos de tortura, su cuerpo estaba desmembrado.

De acuerdo con el reporte oficial, el cuerpo de la mujer fue hallado al interior de unas bolsas plásticas, y en la escena del crimen también fueron confiscados un machete, una almadana y una sierra.

Ante este hecho, el mayor Gilberto Gutiérrez, oficial de Supervisión de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá (Meval), contó que el sujeto que vivía en la habitación la había abandonado hacía tres días. “Estos son elementos conducentes y pertinentes dentro de la investigación, los cuales podrían esclarecer plenamente este hecho lamentable”, agregó el mayor.

De acuerdo con diversas versiones entregadas por los vecinos, el pasado 15 de diciembre escucharon una serie de gritos que provenían del lugar.

Punto aparte, este es apenas uno de los varios casos que se presentaron este año en el país, de personas asesinadas, desmembradas y dejadas en bolsas de basura. Aunque no se ha establecido quien fue el autor material del crimen, la mayoría de estos casos fueron atribuidos al Tren de Aragua.

De hecho, el pasado 15 de diciembre, un caso similar ocurrió en la ciudad de Bogotá. Un cadáver sin identificar fue encontrado en las aguas del Río Tunjuelito, en inmediaciones al barrio La Veguita de la localidad de Bosa, suroccidente de Bogotá.

El torso de un hombre flotando en el afluente capitalino alertó a la comunidad y eventualmente a las autoridades de la Policía Metropolitana de Bogotá, que se comunicaron con Medicina Legal y miembros del cuerpo técnico investigativo (CTI) de la Fiscalía para iniciar una investigación y realizar el levantamiento del cuerpo sin vida.

El cuerpo en cuestión sería de un hombre que, aparentemente, ya llevaba varios días fallecido por cuenta del alto estado de descomposición que tenía.

También, el pasado 19 de abril y el 19 de septiembre, la Policía Metropolitana de Bogotá atendió denuncias de cadáveres flotando a la altura del frigorífico de Guadalupe, en la localidad de Bosa. El primero de ellos se registró en los límites entre las localidades de Usme y Ciudad Bolívar. Hasta el lugar llegaron unidades de criminalística para llevar a cabo el levantamiento del cadáver de una mujer y comenzar una investigación para establecer la causa exacta de esa muerte en la ciudad.

El segundo de los casos fue descrito como un hombre de aproximadamente 50 años que vestía chaqueta azul oscura, pantalón negro y tenis negros con suela blanca. Las autoridades, como primeras hipótesis, afirman que el sujeto no habría muerto a manos de terceros, sino que se trató de un suicidio, o de una caída accidenta del sujeto a este canal de aguas lluvias. Cabe señalar que, durante el respectivo levantamiento del cadáver, no se encontraron documentos que indicaran la identidad del fallecido.

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