Turistas colombianas están atrapadas en Perú por protestas

Una madre y dos hermanas se quedaron varadas por la toma del aeropuerto de Cusco. Hay unos 60 colombianos entre los casi 800 turistas afectados

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Las tres turistas colombianas atrapadas en Cusco, Perú, por las manifestaciones.
Las tres turistas colombianas atrapadas en Cusco, Perú, por las manifestaciones.

Tres turistas de Colombia que viajaron desde Medellín hasta Perú están atrapadas en la ciudad de Cusco por cuenta de la inesperada situación política, que hasta el momento causó la destitución y encarcelamiento del expresidente Pedro Castillo y una oleada de protestas. Las tres mujeres piden ayuda al Ministerio de Relaciones Exteriores para regresar a territorio nacional.

Diciembre puede ser una época difícil para algunos ciudadanos que no tienen muchos recursos para gastar en regalos o vacaciones. De todos modos, la situación siempre puede ser peor: aun si se cuenta con ese privilegio o se trabajó fuertemente para darse un gusto, también se corre el riesgo de pasar unas fiestas amargas, como las que están pasando los 779 turistas que están varados en Cusco desde este martes 13 de diciembre.

“Ciudadanos de diferentes nacionalidades que se encontraban haciendo turismo en Perú, denuncian estar secuestrados por los defensores de Pedro Castillo, que tienen bloqueadas las vías. Llevan 24 horas sin comida, sin baño y temiendo por su vida”, escribió la senadora María Fernanda Cabal, del partido Centro Democrático, y añadió un video que muestra la petición de ayuda de ciudadanos de Chile, Argentina, Bolivia, Estados Unidos, Japón, Francia e Inglaterra.

Aunque no aparecen en el video compartido por la congresista de derecha, habría unos 60 ciudadanos colombianos atrapados en medio de las revueltas de Cusco, según datos de la Cancillería. Una de ellas es la joven Lizmarly Marín, que viajó como turista a Perú el pasado jueves 8 de diciembre, junto con su hermana y su madre. Según lo que le dijeron a la revista Semana, la familia ahorró por un año largo para costear sus viáticos, pero solo pudieron disfrutar su estadía por tres días.

Su vuelo de regreso estaba programado para este miércoles 14, pero el Aeropuerto Internacional Alejandro Velasco Astete, de Cusco, fue cerrado por cuenta de las manifestaciones. Como no había forma de acceder a la terminal aérea, los vuelos fueron cancelados. La aerolínea en la que volaron las colombianas ofreció reprogramar su vuelo para el sábado 17.

Hay varios problemas. En primer lugar, aunque la autoridad aeroportuaria dijo que la terminal aérea se abrirá el viernes 16, se trata de una estimación pero no una garantía. Además, la compañía aérea no les ofreció auxilio de hospedaje o alimentación porque la situación política del país no es culpa suya.

Por lo tanto, las viajeras están subsistiendo con su propio bolsillo y deberán pagar 200 mil pesos colombianos por noche adicional en el hotel donde están alojadas —y de donde es preferible no salir, porque algunos turistas han resultado atracados en medio del caos—. Lo peor de todo, según ellas, es que ni ellas ni los otros viajeros han encontrado comida: los restaurantes están cerrados en el área por miedo a que sus locales sean vandalizados.

Aunque el Gobierno colombiano no ha emitido ninguna advertencia a sus viajeros, embajadas de países como el Reino Unido y España han recomendado a sus ciudadanos limitar su desplazamiento por las calles de Perú y procurar no acercarse a las zonas donde se estén realizando las manifestaciones. Además, han puesto a disposición de sus compatriotas los servicios consulares que hagan falta para mantener su seguridad.

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