Por abuso sexual en reconocida escuela de fútbol de Bogotá la Fiscalía imputará cargos

Pese a que las denuncias se dieron a conocer en agosto, hasta ahora el ente investigador se manifiesta tras el pronunciamiento de la ministra del Deporte, María Isabel Urrutia

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Imagen de archivo del logo de la oficina de la Fiscalía General de Colombia en Bogotá, Colombia. La Fiscalía imputará cargos en el presunto caso de abuso sexual en escuela de futbol femenino en Bogotá REUTERS/Luisa Gonzalez/Archivo

Hace cuatro meses se dieron a conocer denuncias por parte padres de familia sobre posibles abusos sexuales a menores de edad en las escuelas de fútbol femenino, Club Besser por parte de Pedro Ignacio Rodríguez, dueño del club, y Sebastián Esteban Rodríguez, entrenador. La denuncia, que fue dada a conocer mediante una carta al Ministerio de Deportes, no tuvo efecto sino hasta este 14 de diciembre, tras el pronunciamiento de la ministra, María Isabel Urrutia, que en una entrevista con la W Radio dio a conocer que la Fiscalía General de la Nación no habría tomado cartas en el asunto.

Como lo dio a conocer la misma emisora, tras la denuncia hecha por la funcionaria en la mañana de este miércoles, el ente acusador aseguró que imputará cargos a los acusados para comenzar con la investigación formal y se solicitará medida en contra de Sebastián Esteban. Por ahora, la Fiscalía no dio más detalles del procedimiento.

Recordemos que las denuncias fueron reveladas en su momento por Caracol Radio, que tuvo acceso a la carta que enviaron los padres de familia al ministerio, donde se leía que la escuela se había convertido en un espacio peligroso y hostil para las deportistas entre los 9 y 17 años de edad.

“Se trata de una institución muy respetada en el fútbol femenino nacional, que ha formado a futbolistas sobresalientes y que incluso hacen parte de la actual Selección Femenina de Fútbol de Colombia. Los señores Pedro Ignacio Rodríguez Rodríguez y Sebastián Esteban Rodríguez Pachón (este último, entrenador), han tornado a esta escuela de fútbol femenino en un escenario de abuso y acoso sexual a menores de edad”, escribieron los padres de familia en el documento que llegó a manos de Urrutia.

En el espacio de la misiva se hizo énfasis en que el mayor perpetrador de los abusos que recibieron, al parecer, varias menores fue el entrenador que hoy tiene orden de captura, esto como argumentan los denunciantes aprovechando su posición de poder al interior del establecimiento.

Pese a que en el documento no se dieron nombres de las posibles víctimas, los padres de familia aseguraron que el sujeto incurrió en varias prácticas que deben ser condenadas: “Los abusos, vejámenes y humillaciones a las que han sido sometidas nuestras hijas son inconcebibles y por respeto a ellas no haremos alusión expresa a ello. No obstante, debemos manifestar que, entre sus actos, se encuentra el manoseo indebido, el envío de fotografías suyas de sus órganos genitales a niñas y adolescentes, la solicitud de imágenes de contenido pornográfico, el acoso y las amenazas, el sostenimiento de relaciones sexuales y actos de manipulación y de subyugación”.

En su momento, el dueño del establecimiento deportivo habló con Infobae y la respuesta no fue clara, pues evadió la pregunta anotando que hasta no hablar con su abogado no daría declaraciones al respecto, aunque en ese momento si dejó en claro que las autoridades no habían procedido, pues no habían visitado la escuela y no había recibido ninguna notificación sobre la denuncia.

“Voy a consultar con el abogado y con base en lo que él me diga direccionaré esa respuesta porque no puedo entorpecer una investigación, debo colaborar al máximo y por eso debo estar al margen porquee no se trata de entorpecer”, le dijo Pedro Ignacio Rodríguez a Infobae Colombia.

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