Una tensa situación se está generando en Latinoamérica a raíz de la detención de Pedro Castillo por el intento de golpe de Estado. A parte de la confusión en Perú por lo intentado por el que era su presidente, hasta las protestas de miles de personas en las calles componen el panorama político del lugar que era sede del imperio Inca.
A este tenso ambiente se suma el comunicado en conjunto que se emitieron entre cuatro países para sentar su preocupación por lo vivido en el país peruano, pero este ha sido polémico, ya que mientras la mayoría de países se han solidarizado con el pueblo del Perú y sus sistemas de democracia, en el texto emitido por los gobiernos de Colombia, Argentina, México y Bolivia manifiestan su preocupación referente a la situación del detenido Pedro Castillo.
“Para el mundo no es novedad que el Presiente Castillo Terrones, desde el día de su elección, fue víctima de un antidemocrático hostigamiento, violatorio del artículo 23 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, “Pacto de Costa Rica”, aprobada el 22 de noviembre de 1969, para luego ser objeto de un tratamiento judicial de la misma manera violatorio del artículo 25 de la mencionada convención”, se aprecia en el texto emitido.
De igual forma indicaron que exhortan a quienes integran las instituciones de “abstenerse de revertir la voluntad popular expresada con el libre sufragio”.
El documento no tardó en generar varias recciones en contra, desde diferentes partes criticaron el comunicado emitido, siendo una de las primeras críticas la realizada por la directora de la División de las Américas de la Organización Human Rights Watch (HRW) Juanita Goebertus, quien denominó como lamentable la intensión de lo indicado en el comunicado conjunto.
“Lamentable que los gobiernos de Argentina, Bolivia, Colombia y México respondan a la grave crisis en Perú victimizando a Castillo, quien intentó disolver el Congreso en medio de investigaciones por corrupción. América Latina debe apoyar a Perú defendiendo el estado de derecho”.
Otra de las personas que reaccionó fue el ex ministro de Defensa, exgerente general de la Federación Nacional de Cafeteros y doblemente embajador de Estados Unidos Gabriel Silva Luján: “Confirmado, la tan cacareada integración latinoamericana que ha pretendido liderar Petro realmente es una convergencia de compinches ideológicos para proteger sus intereses políticos, por encima de la defensa de la democracia. ¿Dónde quedan los intereses supremos de la Nación?”.
Respecto a lo indicado por Juanita Goebertus indicó el influencer uribista Jaime Arizabaleta: “Lo de Petro es tan grave que hasta sus antiguos aliados la CIDH y Human Rights Watch le han dado la espalda Legítima a golpistas en Perú y libera delincuentes en Colombia Es el inicio de una dictadura”.
Por su parte la Congresista del Centro Democrático María Fernanda Cabal, comentó que lo emitido fue una obra del ’foro de São Paulo’: “el mismo que nos quita la libertad en América Latina, el mismo que se agrupa bajo el denominado Grupo de Puebla (presidentes y expresidentes convictos)”.
De igual forma la política uribisita Paola Holguín mencionó: “Preocupación la nuestra con Gobiernos que respaldan un intento de Golpe, que desprecian la democracia, la división de poderes y el orden Constitucional”.
Antecedentes
“Solicito a la CIDH aplicar la Convención Americana de Derechos Humanos y expedir medidas cautelares en favor del presidente del Perú Pedro Castillo (sic)”.
Fue el mensaje trinado por el presidente Gustavo Petro el pasado 8 de diciembre, tras el intento de disolver el Congreso y poner toque de queda en el Perú por parte de Pedro Castillo y que llevó a ser detenido. La publicación del jefe de Estado colombiano causó mucho malestar en varios sectores nacionales e incluso internacionales que le reprocharon al mandatario el polémico pronunciamiento.
SEGUIR LEYENDO INFORMACIÓN DE COLOMBIA