Incautaron más de 600 botellas de licor adulterado en el centro de Bogotá

En una casa de la localidad de Los Mártires se adelantó el operativo. Más de 500 unidades eran de whisky

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Licor adulterado incautado en Bogotá este viernes 9 de diciembre. Crédito: Policía Metropolitana de Bogotá
Licor adulterado incautado en Bogotá este viernes 9 de diciembre. Crédito: Policía Metropolitana de Bogotá

Este viernes 9 de diciembre, a la víspera de las fiestas de fin de año, la Alcaldía de Bogotá anunció un golpe asestado a la industria criminal del licor adulterado: la Policía Metropolitana de Bogotá, a través de su Seccional de Investigación Criminal (Sijín) incautó 620 botellas de licor que no contaban con los correspondientes registros de ley y que iban a ser distribuidas en la capital. Este operativo fue adelantado en coordinación con la Fiscalía General de la Nación.

Según el teniente coronel Luis Roberto González, jefe de la Sijín de Bogotá, se está adelantando una serie de controles dentro del Plan Navidad para “lograr la incautación de elementos como pólvora y, algo muy importante, que es la persecución de aquellos licores que han sido adulterados o que han sido manipulados y que nos han causado afectaciones a la salud de los ciudadanos”.

El uniformado aseguró que esta mercancía decomisada está avaluada en más de 250 millones de pesos y fue encontrada en un inmueble de la localidad de Los Mártires, en el centro de la capital colombiana. La mayoría de las botellas incautadas —549 de ellas— correspondía a whisky de diferentes marcas. También decomisaron 13 botellas de tequila, 54 unidades de ron y 4 más de aguardiente. En el operativo también decomisaron cajas y estampillas para perfeccionar la falsificación de estos productos.

Tras el hecho no hubo capturas, pero las autoridades están buscando a los responsables del cargamento para imputarlos por los delitos de corrupción de alimentos productos médicos o material profiláctico, además de imitación o simulación de alimentos, productos o sustancias. La condena por estos crímenes puede alcanzar los 11 años de prisión, una multa de 1.500 salarios mínimos y el cierre definitivo del establecimiento.

El teniente coronel aseguró que estos operativos continuarán y recomendó a la ciudadanía que compren sus bebidas alcohólicas en sitios reconocidos y de cadena, que puedan garantizar su origen y legalidad.

Además de revisar “las características importantes en cada una de estas botellas, como es verificar las estampillas legales, desconfiar de un precio demasiado económico, verificar que una vez se obtenga una botella de estas no tenga grumos, burbujas o material que se presuma que ha sido adulterada”. En caso de que el producto le genere alguna duda, evita comprarlo y repórtalo ante los empleados del establecimiento.

Cabe recordar que, al corte del 8 de diciembre, en Bogotá ya hubo 16 muertes y 28 intoxicaciones por el consumo de licor adulterado. Entre el 24 de noviembre y el 7 de diciembre se adelantaron 131 operativos y se clausuraron 28 establecimientos por vender este tipo de bebidas.

El mayor peligro es el metanol

El mayor riesgo de comprar licor adulterado es la posible ingesta de metanol o alcohol metílico, utilizado con fines industriales y automotores, lo que lo hace extremadamente tóxico y no es apto para el consumo humano. Sin embargo, personas inescrupulosas utilizan este componente químico para crear falsificaciones de bebidas alcohólicas que ponen en riesgo de muerte a quienes las consumen.

La Secretaría de Salud de Bogotá señaló en su comunicado que el consumo de esta sustancia puede provocar daño al sistema nervioso central, visión borrosa, ceguera, dificultad respiratoria, estado de coma e incluso la muerte. Por esto, invitaron a los ciudadanos a verificar que las bebidas alcohólicas que adquieran cuenten con las medidas de salubridad necesarias.

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