Desde que la muerte de Pawel Camilo Restrepo, quien fue drogado y robado en un bar de “Cuadra Picha” en la Primera de Mayo en el sur de Bogotá, han pasado ocho meses en los que se está tratando de establecer responsabilidades por parte de la justicia competente.
Restrepo fue escopolaminado, pero eso no fue lo que lo llevó a su muerte, fue atropellado por un carro, presuntamente, tras ser dejado a su suerte por dos uniformados de la Policía Metropolitana de Bogotá (MEBOG), quienes lo habían encontrado drogado minutos antes.
La esposa de Restrepo, llamada Deisy Rodríguez, busca consuelo en encontrar la verdad de lo que pasó en la noche 12 y la madrugada del 13 de mayo; y ello ha llevado a que se abran tres investigaciones diferentes por la muerte de Pawel.
En la primera investigación se aborda la responsabilidad del conductor que atropelló a Restrepo en la avenida Américas; la Fiscalía le imputó el le imputó el delito de “homicidio culposo por exceso de velocidad e infracción a señales de tránsito”, pero el hombre no aceptó los cargos señalados por el ente investigador.
La segunda investigación busca establecer la culpabilidad de la muerte de Restrepo por parte de los dos uniformados de la Policía Metropolitana de Bogotá, quienes - según varias versiones- dejaron a Pawel a la entrada de la Clínica de Occidente a su deriva y no avisaron en el centro asistencial del estados en el estaba.
Y la tercera investigación que se lleva a cabo con el fin de buscar a las “tomaseras”, que son las mujeres que escopolaminaron y robaron Restrepo y a su amigo-llamado Freddy-, quien también fue drogado - con sustancias para pacientes psiquiátricos- para robarle sus pertenencias.
“No podemos normalizar que no se pueda salir a tener un momento de esparcimiento porque se puede ser víctima de un robo y menos que cuando se denuncie se victimice más y se cuestione el comportamiento de la gente”, señaló Rodríguez a el Tiempo (ET).
Cifras de homicidios en Bogotá, según la Alcaldía Mayor
Esta semana, tras un consejo de seguridad entre la Policía Metropolitana de Bogotá (MEBOG) y la Secretaría de Seguridad; Aníbal Fernández de Soto, secretario de esa cartera, reveló diferentes cifras de orden público en la capital entre ellos, el homicidio, con corte al final del mes de noviembre.
Según las cifras del Distrito, se registraron 910 homicidios en lo que va del 2022; Fernández señaló que hubo una reducción de este delito en un 12,9 por ciento. En noviembre hubo una mayor disminución en casos registrados si se le compara con las cifras de los últimos 10 años.
“Nosotros nos hemos puesto una meta muy ambiciosa en términos de reducción de homicidios, y estamos anticipando un buen cierre de este indicador. Hay que destacar también la labor de Fiscalía y de la Justicia que han logrado un esclarecimiento del 45% de los homicidios en la ciudad”, indicó Aníbal Fernández de Soto en rueda de prensa.
Cabe señalar que a principios de 2022, la alcaldía de Claudia López se estableció la meta de reducir en un 15% los homicidios en la capital del país. Por lo que el Distrito estaría ad portas de cumplir este objetivo, si las cifras o casos se mantienen hasta finalizar diciembre de 2022.
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