Jhonny Vásquez, el capitán del Pereira y una historia del triunfo de la voluntad

El Deportivo Pereira se coronó campeón de la Liga Betplay 2022 del segundo semestre, en la que se convirtió en la primera estrella de su historia como institución. El cuadro dirigido por Alejandro Restrepo derrotó al Independiente Medellín por la final de la Liga Betplay tras empatar 0-0 en el partido disputado en el estadio Hernán Ramirez Villegas de Pereira y jugarse todo en la definición por penaltis donde los ‘Matecañas’ superaron al Poderoso gracias a la destacada actuación de Harlen ‘hipi Chipi Castillo.

En un cuadro que tuvo en el guardameta o en Leonardo Castro a sus jugadores más destacados de la campaña, el caso de Jhonny Vásquez, capitán del Pereira, merece una mención aparte. El volante de 35 años ya se había mostrado visiblemente emocionado durante los actos protocolarios, al punto de que lloró durante los himnos. Durante el partido contribuyó para mantener el orden de su equipo tanto en ataque como en defensa dejándolo todo en el campo de juego. Aunque no fue uno de los cobradores designados en la tanda de penaltis, durante la transmisión del partido se le vio desde el banco, rezando de rodillas para que sus compañeros concretaran la hazaña.

El cobro de Léider Berrio que le dio el título al Pereira desencadenó emociones contenidas en Vásquez, que venía de superar años atrás un partido aún más difícil. En 2015, cuando jugaba para el Junior de Barranquilla, estuvo a punto de abandonar la actividad deportiva debido a que se le detectaron anomalías en la sangre que derivaron en un diagnóstico de leucemia mieloide crónica.

Desde ese momento la vida del jugador oriundo de Santander de Quilichao, Cauca, cambió de forma radical. “Me choqué con la vida. En ese momento pensé en mi familia, en el trabajo, en todo lo que me rodea. Me preguntaba: ¿por qué yo?”, comentó antes de la final cuando rememoró ese difícil momento de su vida

El indio, como lo conocen, no se rindió y siempre soñó con volver a jugar al fútbol. Si bien esa posibilidad ya no la tendría en Junior, volvió a tener la oportunidad en el América de Cali mientras continuaba con su tratamiento, donde consiguió el ascenso en 2016, finalizando así la estancia del cuadro Escarlata en la segunda división. Más tarde, en 2018 se fue a Águilas Doradas y luego recaló en el Deportivo Pereira cuando el equipo todavía estaba en la B.

Lo que parecía un paso atrás importante en su carrera, luego de jugar en dos equipos “grandes” del fútbol colombiano, terminó con Vásquez encontrando su lugar en el mundo. En 2019 logró el ascenso con el Matecaña luego de once años de espera, y tras una serie de campañas destacadas donde pasaron de asegurarse la permanencia en la máxima categoría a ser un animador del campeonato colombiano. Ya en 2021 dio un aviso de que se estaba forjando un equipo competitivo cuando alcanzó la final de la Copa BetPlay que perdieron con Atlético Nacional.

Ahora, convertido en la voz de mano del Pereira en el vestuario, lideró a su equipo hasta conseguir el título más importante de su historia, luego de superar la prueba más difícil de su vida. Tanto Vásquez como el Deportivo Pereira, ratificaron esta noche que lo de ambos es el vivo ejemplo del triunfo de la voluntad por encima de todo lo demás.

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