Faustino Asprilla aseguró que Pablo Escobar no era dueño de Atlético Nacional

El exfutbolista se refirió a la influencia directa del narcotráfico en el fútbol colombiano durante los años ochenta y noventa, asegurando que durante su carrera se mantuvo alejado de esas situaciones

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Asprilla, quien jugó en Atlético Nacional entre 1990 y 1992, aseguró que nunca recibió ordendes del capo del Cartel de Medellín durante su estancia en el cuadro 'verdolaga'
Asprilla, quien jugó en Atlético Nacional entre 1990 y 1992, aseguró que nunca recibió ordendes del capo del Cartel de Medellín durante su estancia en el cuadro 'verdolaga'

Faustino Asprilla es uno de los jugadores más emblemáticos y más reconocidos en la historia del fútbol de Colombia. Su velocidad en el desmarque y su capacidad para definir en la portería rival con el Cúcuta Deportivo y Atlético Nacional lo llevaron a jugar en dos clubes emblemáticos de los años noventa como fueron el Parma de Italia y el Newcastle United de Inglaterra, así como a vestir los colores de la Selección Colombia, con los cuales convirtió 20 goles en 58 partidos.

Durante sus inicios en el fútbol colombiano, el delantero nacido en Tuluá dio sus primeros pasos en el profesionalismo en una época donde el narcotráfico era omnipresente en Colombia, producto de la influencia de los dineros de los carteles de Medellín y Cali en toda la vida nacional. El deporte no fue ajeno a ello y es bien conocida la relación estrecha de equipos como Atlético Nacional, Millonarios o América de Cali con capos del narcotráfico durante ese periodo. En algunos casos era de forma directa como el caso del cuadro ‘escarlata’ con los hermanos Rodríguez Orejuela que más tarde los llevó a ser incluidos en la llamada ‘lista Clinton’. En otros se hacía bajo la figura del testaferro, como en el caso del ‘verdolaga’ y de Independiente Medellín donde Pablo Escobar tenía intereses, mientras que en el caso del cuadro ‘embajador’ el que tenía influencia era Gonzalo Rodríguez Gacha ‘El Mexicano’.

Durante una entrevista en el programa de YouTube ‘La sala de Laura Acuña’, donde repasaban momentos cumbre de su carrera, el ‘Tino’ habló de este tema con la presentadora. Cuando le preguntaron si alguna vez había recibido dineros del narcotráfico durante su carrera profesional, el ex-jugador señaló:

“Eso es pura mentira. A mí nunca me pasó que ningún narcotraficante me diera órdenes para jugar al fútbol. Nunca tuve nada que ver, y ese cuento de que Pablo Escobar era el dueño de Atlético Nacional es mentira. No me tocó y en el Cúcuta tampoco, fueron los equipos donde jugué en Colombia. Jamás me pasó algo así”

En otro aparte de la entrevista recordó a Andrés Escobar, defensor central de la Selección Colombia y compañero de Asprilla en Atlético Nacional que fue asesinado días después de regresar al país y luego de marcar un autogol con Colombia en el Mundial de Estados Unidos 1994 contra el país anfitrión. Si bien nunca se comprobó quienes fueron sus asesinos o si fue por causa de dicho autogol, la versión que más ha trascendido es que los hermanos Gallón Henao, narcotraficantes de la época, fueron los autores intelectuales del hecho:

“Yo recuerdo a Andrés que era un amigazo, un tipazo. Él vivía a la vuelta de mi casa, Aristizábal y yo no teníamos carro y él siempre pasaba por nosotros para ir al entrenamiento. Él era muy puntual y me recogía a las 6:30, pero yo bajaba trasnochado y él me esperaba furioso porque siempre iba tarde, me regañaba todo el camino. Siempre me advertía que no iba a pasar más por mí, pero siempre me recogió”

El pasado miércoles, Asprilla también contó en el canal de YouTube de su amigo ‘Caremonja’ una anécdota relacionada con los Rodríguez Orejuela, posterior al asesinato de Andrés Escobar. Debido a que andaba con guardaespaldas debido al temor de que pudiera correr la misma suerte, uno de ellos respondió a un insulto que le lanzaron al ‘Tino’ en la calle y disparó, sin saber que se trataba de un sobrino de los capos del Cartel de Cali. En la charla contó que Freddy Rincón, cercano a los Rodríguez Orejuela por su pasado en el América, tuvo que intervenir para que el tema no pasara a mayores.

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