Elizabeth Taylor Joy y Carolina Olarte-Bácares: el papel de las dos mujeres coagentes en el litigio territorial en La Haya

El litigio territorial en La Haya entre Colombia y Nicaragua inició en 2013 y después de casi una década, por primera vez dos mujeres serán coagentes de la defensa nacional ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ). La abogada Carolina Olarte-Bácares tiene una perspectiva desde el derecho internacional que se conectará con el conocimiento científico de la bióloga marina Elizabeth Taylor Joy y los demás integrantes del equipo que buscarán proteger la soberanía del país.

La disputa entre ambas naciones tiene que ver con una presunta plataforma continental que está alegando Nicaragua, “que se extiende mucho más allá de las 200 millas náuticas de la costa nicaragüense”, de acuerdo con la Cancillería. La defensa colombiana ha mantenido la postura de que la CIJ “no tiene nada que delimitar” en el archipiélago de San Andrés y Providencia y prepararon una base sólida que presentarán en las audiencias orales del 5 al 9 de diciembre de 2022.

Infobae Colombia habló con las dos coagentes sobre la importancia que tendrán en este litigio internacional que también afectaría a otros países del Caribe. Esto teniendo en cuenta que Costa Rica, Panamá y Jamaica estarían preocupados por las intenciones nicaragüenses.

—¿Cómo recibió el nombramiento de coagente ante La Haya de la defensa de Colombia por el diferendo con Nicaragua?

—Carolina Olarte-Bácares (C.O.): Recibí este nombramiento como parte del grupo nacional ante la Corte Permanente de Arbitraje (CPA) de La Haya con gratitud, pero con un altísimo grado de responsabilidad por la confianza que ha depositado el Gobierno nacional en mí.

—Elizabeth Taylor Joy (E.T.): Fue para mí una grata sorpresa. Estoy honrada de verdad de poder representar a nuestro país en un caso que es de interés nacional para la defensa de la soberanía del país y también de poder representar a mis hermanos raízales en este asunto que es de importancia para nuestro pueblo.

Taylor Joy es raizal de Providencia, por lo que su papel en la CIJ es un hito y —contrario a lo que otros piensan— sus aportes científicos pueden llegar a ser realmente significativos. La bióloga marina cuenta con una maestría en Protección del Ambiente Marino de la Universidad de Gales, en Reino Unido, y fue directora de la corporación ambiental Coralina y embajadora de la República de Kenia durante tres años.

—(E.T.): Mi papel aquí pienso que es fundamental. Es incorporar esa visión holística también a las diferentes discusiones que se están dando a la luz de la preparación de las audiencias hacia la Corte, pero también tener la posibilidad de aportar mi conocimiento científico y técnico sobre el área, sobre la Reserva de la Biosfera Seaflower.

—¿Qué significa para usted que una mujer raizal sea escogida como coagente de Colombia ante La Haya?

—(E.T.): Creo que no solo tiene un significado para mí como mujer raizal, sino como mujer colombiana. Es la primera vez también que el país hace una designación de este tipo: somos dos mujeres coagentes en este caso. Va en línea con las políticas de inclusión del nuevo gobierno y de, por supuesto, tener en consideración en todos los aspectos relacionados con los pueblos indígenas.

Lo cierto es que el respeto entre ambas mujeres fue evidente desde sus respuestas. Para Carolina Olarte-Bácares la designación es altamente significativa. “Históricamente, las mujeres no habían tenido un espacio específico en esta posición”, manifestó la decana de Derecho de la Pontifica Universidad Javeriana. Aunque desde el grupo de abogados internacionales sí habían tenido varias oportunidades, con el apoyo de Talylor Jay la perspectiva será otra.

—Carolina Olarte-Bácares (C.O.): Da cuenta de una solvencia jurídica y científica femenina que refuerza los argumentos del Estado colombiano. Hago énfasis en lo jurídico y lo científico, poniendo de antemano que yo soy jurista internacionalista y que Elizabeth Taylor Jay es raizal y una persona que ha tenido una formación y una experiencia en el ámbito científico y medioambiental muy connotado.

Respecto a la reclamación de Nicaragua para que se establezcan los límites entre una supuesta plataforma continental más allá de las 200 millas náuticas de las líneas base de Nicaragua, las expertas no dieron detalles sobre los argumentos que presentarán en las audiencias orales; sin embargo, sí hablaron acerca de las implicaciones y enfatizaron que no existe “una base legal” en las demandas del país centroamericano.

—(C.O.): El impacto de las pretensiones de Nicaragua es de toda la relevancia. No solamente frente a aspectos concretos de soberanía respecto de la cual defenderemos, por supuesto, la titularidad colombiana, sino también con respecto a al ejercicio de los derechos en ese en la plataforma continental extendida.

—¿Cuál es la postura de Colombia ante los derechos de los raizales y de los ecosistemas afectados?

—(C.O.): La postura de Colombia siempre ha sido la de velar por la protección de los ecosistemas marítimos y de los derechos que para las comunidades de allí se derivan. Como país siempre hemos respetado y protegido la sostenibilidad, en particular, hemos protegido de una manera muy evidente los derechos e intereses actuales y de las generaciones futuras. El lecho y el subsuelo marino custodian, como todo el mundo lo sabe, gran parte de la sostenibilidad del mundo y en particular, el futuro energético del país y del Caribe.

—¿Cuáles serán las prioridades para defender al pueblo raizal y sus derechos ancestrales desde la defensa ante La Haya?

—(E.T.): La posición de Colombia es que los reclamos de Nicaragua no tienen asidero, ni legal, ni técnico. Por ende, el equipo jurídico y el equipo técnico que está trabajando va a presentar en las audiencias próximas los argumentos para defender esa posición y tesis de Colombia.

—¿Cuál es su mensaje para el pueblo colombiano, especialmente, para los raizales que podrían verse afectados?

—(C.O.): En este momento la defensa de sus intereses se encuentra en manos de un equipo que está fortalecido y que está orientando todos sus argumentos sólidos de defensa hacia la persuasión de la Corte Internacional de Justicia respecto de la inexistencia de cualquier base para que entre a delimitar en esas cuestiones sobre una supuesta plataforma continental extendida que está alegando Nicaragua.

—(E.T.): Garantizarles que tenemos un buen equipo de trabajo: los juristas internacionales siguen siendo los mismos y el equipo a nivel nacional es altamente competente y comprometido con este trabajo. Esperamos que nuestros esfuerzos sean en el futuro recompensado con el reconocimiento de estos argumentos.

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