Tras el anunció del Gobierno Nacional sobre la política de ‘paz total’ varios exmiembros de grupos armados que fueron condenados en su momento por diferentes crímenes relacionados con hechos de guerra en Colombia han expuesto su voluntad de hacer parte de la construcción de paz. En los últimos días, Francisco Javier Zuluaga, alias Gordo Lindo, fue liderado tras pasar varios años en La Picota y a través de su defensa manifestó su disposición de ser gestor de paz.
“Francisco Javier Zuluaga Lindo con el poder a mi conferido, solicita al presidente Gustavo Petro ser tenido en cuenta como gestor de paz o mediador de paz en la política de Estado de una paz total”, indicó la abogada Angélica Martínez Cujar, en entrevista con RCN Radio.
De acuerdo con lo expuesto en la misiva que fue enviada al Gobierno Nacional, la solicitud la hace teniendo en cuenta que al haber sido un cabecilla de las AUC tiene la experiencia para poder aportar en los procesos que está llevando a cabo la administración de Gustavo Petro, además, de colaborar con su versión de la verdad.
“Por su estatus que tuvo en las autodefensas en el cual él se desmoviliza, él quiere ser gestor de paz o mediador para colaborar con los grupos que se encuentran en este momento en armas”, dijo la jurista al medio colombiano, quien agregó que sumado a esto, conoce a algunas personas que siguen en la vida criminal: “Él (Gordolindo) conoce algunas personas de esos grupos y puede servir como mediador para que dejen las armas para que se acojan a la justicia, cuenten la verdad y reparen”.
Finalmente, hizo énfasis en que tras pagar su condena y reparar sus víctimas, sé encuentra dispuesto a decir algunas verdades que en su momento no pudo, pues “el Gobierno Nacional de ese entonces trata de callarle”.
Recordemos que ayer se le dio libertad al exparamilitar, por medio de un recurso de hábeas corpus. La carta de libertad fue expedida por parte del Juzgado Quinto de Ejecución de Penas de Bogotá y avalada y autorizada, por parte del Inpec, con lo cual se le permitió su salida de la cárcel de máxima seguridad.
Alias Gordo Lindo nació en Cali en 1970. En los años ochenta hizo parte del cartel de Medellín y trabajó en el tráfico de drogas con los hermanos Ochoa Vázquez y Juvenal Madrigal. Zuluaga llegó al paramilitarismo por la amistad que tenía con Carlos Castaño, quien le encomendó el manejo financiero del Bloque Calima, que operaba en Valle, Cauca, Chocó y un sector de Huila en 1997.
No es el único exlider del paramilitarismo que ha manifestado su voluntad para ser gestor de paz, hace un mes Salvatore Mancuso, también envió un mensaje al Gobierno. “Cuente conmigo (...) para ayudarle en la titánica tarea de construir la paz total. Dígame, señor presidente, cuál es el paso a seguir, estoy listo para entablar una conversación (...) con quien usted considere para materializar esta voluntad compartida de entregarle a las nuevas generaciones una Colombia pacificada y más humana”, expresó Mancuso en una carta publicada en redes por el presidente Gustavo Petro.
El exparamilitar hizo énfasis de que así como en su momento puso todo su esfuerzo en la guerra, ahora está dispuesto a hacer todo para que el país logre una paz estable y duradera; y en esta línea uno de los aportes que dará es desde la verdad: “No tengo impedimento alguno para asumir las tareas que correspondan en el objetivo compartido de lograr la paz total para Colombia”.
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