Línea de emergencias 123: el 65 % de las llamadas son bromas

La entidad Distrital de Seguridad resaltó que este canal únicamente se debe utilizar para reportar casos de salud, robos, incendios, riñas, accidentes de tránsito, deslizamientos, inundaciones e incidentes de violencia

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Bogotá hoy cuenta con una línea de emergencias más moderna que cumple con los estándares internacionales NENA, lo que ha permitido que las llamadas sean atendidas con mayor efectividad.
Foto vía: Secretaría de Seguridad.
Bogotá hoy cuenta con una línea de emergencias más moderna que cumple con los estándares internacionales NENA, lo que ha permitido que las llamadas sean atendidas con mayor efectividad. Foto vía: Secretaría de Seguridad.

La Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia de Bogotá dio a conocer que a través de la Línea de Emergencias 123 de la ciudad se reciben a diario cerca de 21.000 llamadas de las cuales un aproximado del 65 % (14.300) son improcedentes, es decir, bromas o solicitudes de información general y no para contratiempos de gran veracidad.

Por tal razón la entidad distrital de Seguridad viene efectuando una campaña pedagógica frente al uso correcto de esta línea, dirigida particularmente para reportar emergencias de salud o si una persona o comunidad es víctima o testigo de un incendio, riña, robo, accidente de tránsito (con o sin heridos), inundaciones, deslizamientos de tierra, violencia física intrafamiliar, violencia contra los animales o contra la mujer.

Cabe resaltar que según la secretaría, estas llamadas a través de la línea de emergencias123 en Bogotá son recibidas máximo en cuatro segundos y entre 2 y 4 minutos se gestiona o se transfiere el caso con la entidad a cargo para su posterior atención.

Por su parte, el secretario Distrital de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, hizo un llamado a todas y todos los habitantes de Bogotá para hacer uso correcto de línea de emergencias, además añadió que todo aquel que llame para hacer bromas será reportado al inspector de Policía para un posible comparendo por el mal manejo de esta.

“Tenemos 340 operadores encargados de recibir las llamadas las 24 horas del día y un apoyo de un gran equipo de supervisores quienes garantizan una atención oportuna los 365 días del año. Ellos no están para perder el tiempo atendiendo bromas mientras otros esperan que su emergencia sea atendida”, agregó Fernández de Soto.

Así pues, la atención de esta línea es coordinada y monitoreada por la entidad de Seguridad e integrada por seis entidades encargadas de atender los incidentes reportados por los ciudadanos, entre estas: el Instituto Distrital para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático (IDIGER), el Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá, la Secretaría Distrital de Salud, la Policía Metropolitana de Bogotá y las Secretarias de la Mujer y de Movilidad.

Según lo señala la Secretaria de Seguridad, la capital cuenta con una línea de emergencias más modernas y sofisticada. Desde el primer semestre de 2022, este canal cuenta con una nueva plataforma telefónica la cual cumple con los estándares internacionales NENA (Asociación de Números de Emergencia 911) lo que ha posibilitado que sean atendidas con mayor efectividad.

Cabe destacar que durante el primer semestre de 2022 la Línea de Emergencias 123 atendió llamadas procedentes, en su mayoría, para la atención de riñas (6,17%), por ruido (4,28%) y accidentes de tránsito (4,14%), entre otras situaciones.

Por otro lado, la administración de Claudia López ha venido invirtiendo en capacidad operativa para los organismos de seguridad en Bogotá, con el fin de contrarrestar los casos de inseguridad que azotan varias zonas de la capital colombiana.

Desde 2020 a la fecha, el distrito ha hecho una inversión de $820 mil millones en capacidades operativas para los organismos de seguridad: la Policía Metropolitana de Bogotá, la Brigada XIII del Ejército, la Fiscalía General de la Nación, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Migración Colombia,

Lo anterior ha permitido que la ciudad cuente con un fortalecimiento tecnológico, una mejor movilidad y una logística más eficiente, así como la incorporación de 1.500 nuevos policías y la terminación de la construcción del nuevo comando de la MEBOG.

Esta inversión en elementos como cámaras de videovigilancia, drones, radios, carros, motos, camionetas, sistema Abis de reconocimiento y otros elementos permite generar mejores resultados en reacción inmediata y respuestas más oportunas y eficaces a las problemáticas delictivas y de convivencia en la ciudad, mayor operatividad en los cuadrantes y en zonas de alto impacto y reducción en los índices delictivos de la ciudad.

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