La acción de tutela que Emilio Tapia interpuso en contra de la exministra Karen Abudinen por supuestamente injuriarlo, calumniarlo y perseguirlo fue declarada improcedente por el Juzgado Sexto Administrativo Oral del Circuito de Barranquilla. La decisión se debió a una ausencia en el procedimiento por parte del contratista.
Tapia había radicado la tutela en contra de Abudinen porque en varias entrevistas y publicaciones en redes sociales, lo había llamado “hampón”, “delincuente”, “jefe de una banda de criminales” entre otros calificativos, debido a que lideró la Unión Temporal que ganó la adjudicación del contrato de Centros Digitales ante el Ministerio de las TIC con documentos falsos.
Por esa razón, el condenado contratista solicitó la protección de sus “derechos fundamentales a la honra, buen nombre, imagen, intimidad personal y familiar, y prohibición de la discriminación”, según el diario El Heraldo. Los cuales buscó proteger con una acción de tutela contra la exministra.
Pero el juzgado consideró que ese no era el recurso procedente para amparar sus derechos. La jueza, al evaluar el escrito presentado por la defensa de Tapia, señaló que primero debió agotar una solicitud de rectificación que pudo hacer por otro medios.
La jueza Lilia Yaneth Álvarez Quiroz señaló que Tapia, según Blu Radio, debió acreditar una solicitud previa de rectificación que pudo haber elevado por medio de Twitter, una de las plataformas en las que la exministra se ha referido al pasado judicial del contratista y que generaron su molestia.
Emilio Tapia fue condenado en 2015 por hacer parte del denominado Carrusel de la Contratación en Bogotá que se apropió de dineros públicos para obras de infraestructura. Recientemente quedó en libertad por ese caso, pero debió volver a la cárcel por su presunta participación en otros casos de corrupción.
Anónimamente estuvo detrás de la Unión Temporal Centros Poblados que presentó garantías bancarias falsas para hacerse con la adjudicación del contrato más ambicioso del pasado gobierno en el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.
El contrato de Centros Digitales que buscaba llevar internet a las poblaciones más alejadas del país, que incumplieron tras recibir un anticipo por 70.000 millones de pesos, que aún no se ha recuperado. Por estos hechos, Tapia se encuentra recluido en la cárcel El Bosque de Barranquilla.
Fue a raíz de ese proceso que se enfrentó con la ex ministra Abudinen, quien estaba a cargo del contrato. Ella sostiene que los contratistas la engañaron junto con la entidad, en ningún momento se mencionó el nombre de Tapia y que fue quien denunció ante la Fiscalía “la trama criminal” para apropiarse de los recursos públicos.
“Es inaudito que ahora Emilio Tapia como cabeza de esta banda de criminales me señale como responsable de pánico en redes sociales al haber alertado a las autoridades y a la opinión pública sobre las actuaciones de él y de sus cómplices”, sostuvo Abudinen el pasado 19 de octubre en un comunicado, a raíz de las denuncias que presentó el ex contratista en su contra.
El abogado Jaime Lombana, que representó a la exministra, sostuvo que las expresiones utilizadas por Abudinen para referirse a Tapia se derivan del pasado judicial del contratista condenado. “No es inadecuado y ofensivo para una víctima el uso del vocablo hampón para referirse a un ciudadano condenado en múltiples ocasiones por hechos de corrupción”, dijo al diario El Tiempo.
Tapia también denunció a Abudinen, según reveló el periodista Daniel Coronell, por cinco delitos, por haber firmado un contrato con un documento falso que justamente presentó la Unión Temporal. Sin embargo, la ex funcionaria ya fue reconocida como víctima en uno de esos procesos.
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