Este jueves 17 de noviembre de 2002, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, convocó a las organizaciones campesinas del país y al Gobierno nacional a participar de la Mesa de Impulso a la Política Nacional para el Campesinado Colombiano, que se realizó en la sede central de la Defensoría del Pueblo en Bogotá.
El funcionario explicó que esta iniciativa surge ante la necesidad de diversas organizaciones nacionales y regionales de construir una política pública para el campesinado que les permita a las comunidades exponerle sus recomendaciones y prioridades al Gobierno nacional, de cara a la construcción del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026.
Hay que señalar que durante el proceso de empalme entre el gobierno de Iván Duque y el de Gustavo Petro, la Defensoría del Pueblo elaboró una serie de recomendaciones en temas rurales y agrarios, que servirán como hoja de ruta para iniciar la conversación y la construcción de una agenda conjunta durante el desarrollo de la Mesa de Impulso que encabezó Carlos Camargo.
Dentro de las temáticas que se trabajaron este jueves, como ejes articuladores en el marco de la Mesa están: el cumplimiento de la Reforma Rural Integral, la celeridad en los programas del Acuerdo Final de Paz (PDET y PNIS), la restitución de tierras, las mujeres rurales y el impulso de prácticas agroecológicas y de Agricultura Campesina, Familiar y Comunitaria (ACFC).
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En otro punto, Camargo expresó que estas recomendaciones “son el resultado del análisis y la evaluación realizada por la Delegada de Asuntos Agrarios a los programas y proyectos desarrollados por el gobierno anterior, en materia de acceso a la tierra, productividad rural, territorialidad campesina, restitución de tierras, entre otros”.
Una de las conclusiones que surgió en la Mesa de Impulso a la Política Nacional para el Campesinado Colombiano, es que Colombia sigue teniendo altos índices de concentración de tierra en unos pocos.
“La situación de vulnerabilidad de los campesinos en Colombia, sujetos de especial protección constitucional, es evidente: el índice de concentración de la tierra sigue siendo uno de los más altos del mundo (0,89)”, dijo Camargo.
De acuerdo con lo expresado en la reunión, para dar solución a esta problemática se plantea construir lazos entre todos los actores que están inmersos en políticas campesinas, para que brinden oportunidades y protección a los derechos del campesinado, mejorando su calidad de vida.
Así mismo, el defensor Carlos Camargo aseguró que “la construcción de la política pública para el campesinado debe contar con un enfoque de género, y en ese sentido: las mujeres rurales y campesinas deben ser actores fundamentales en la construcción de la misma”.
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Respecto a los compromisos pactados en el Acuerdo Final de Paz, el director de la Defensoría del Pueblo puntualizó que: “hemos evidenciado que, si bien se advierten avances en la estructuración de lo pactado en el punto 1 de Reforma Rural Integral, estos resultan modestos si se comparan con las grandes necesidades del campo”.
En el evento hicieron presencia 24 organizaciones campesinas, más de 20 instituciones del Estado, cuatro Ministerios y entidades del sector rural.
Una de las organizaciones campesinas que hizo presencia en el espacio fue la Asociación Nacional De Usuarios Campesinos De Colombia (ANUC): Agradecemos a la Defensoría del Pueblo por la invitación a participar en esta Mesa de impulso a la política Nacional para el Campesinado Colombiano, escenario que contribuye a la construcción de la convención campesina nacional”, afirmó el colectivo campesino.
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