Colombia sería una de las economías menos afectadas ante la desaceleración de 2023: José Antonio Ocampo

Para el ministro de Hacienda, uno de los efectos el próximo año será la baja en las tasas de interés

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José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda, en el Foro Economía y Negocios 2022.
José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda, en el Foro Economía y Negocios 2022.

El anuncio de recesión económica mundial para 2023 emitido por el Fondo Monetario Internacional (FMI) generó incertidumbre en todos los países, principalmente en Colombia, donde está a punto de ser ley de la República la reforma tributaria del presidente Gustavo Petro.

Sin embargo, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, se refirió a dicho asunto y afirmó que el escenario para Colombia no es muy brillante, pero tampoco es tan malo.

Ocampo afirmó que en todo el mundo se espera que haya una desaceleración fuerte de las economías y que en Estados Unidos y los países europeos ya se habla de recesión y en ese contexto de previsiones también se ve que en América Latina entrará en un proceso de desaceleración no de recesión.

“En todas esas previsiones, Colombia sale relativamente bien en el sentido de que la economía colombiana sería un poco menos afectada que otros. Uno ve las tres entidades multilaterales que han sacado previsiones de crecimiento para el 2023 (FMI, Banco Mundial y Cepal), y todas dicen que en Colombia habrá un crecimiento por encima del 2 %, el mejor de América Latina para el 2023″, indicó el ministro en el Foro de Negocios Forbes, celebrado este miércoles,

No obstante, precisó que hay varios puntos en esa desaceleración de la economía mundial que afectarán a Colombia. El primero es que las tasas de interés bajarán.

“Ya empezamos a verlo. Los títulos de deuda pública (TES) tuvieron una baja importante en el último mes. Esperamos que a medida de que la inflación baje a nivel mundial haya una reducción de las tasas internacionales, que son claves para nosotros, incluso en términos de financiamiento del Gobierno”, anotó.

Otro, según Ocampo, es el gasto público. En cuanto a esto, se refirió a la reforma tributaria y los nuevos impuestos que acarrea la misma.

“Cuando uno pone impuestos, se hace recaudo y los gasta, el efecto de la demanda es positivo, sobre todo si gasta en sectores sociales. Por ejemplo, con la tributaria, las ganancias más importantes se generarán de los sectores de petróleo y gas, no generarán gasto. En cambio, si se deben con otros impuestos y se gastan en programas sociales, ahí si habrá gasto”, anotó.

Resaltó que los sectores de petróleo y gas están en periodo de gran bonanza y por eso es necesario que parte de la ganancia se le destine al gasto social, lo cual es una tendencia internacional y los europeos ya lo hacen a gran escala.

“Ese impuesto extraordinario establecido tenderá a bajar si bajan los precios. Cuando haya condiciones normales, a nuestro juicio, en tres o cuatro años, esos impuestos extraordinarios ya no estarán”, anotó.

El tercer punto está relacionado con la inflación, pues para el año entrante los analistas prevén una baja de esta y los salarios aumentarán, lo que es otro efecto positivo.

Recursos reforma tributaria

Al ser consultado por el destino de los recursos de la reforma tributaria, Ocampo dijo que se hará una asignación de recursos muy similar a la adición presupuestal presentada este año. Con esto, entonces, se ampliaría la magnitud de los programas.

“Este año, el sector más beneficiado fue el sector agropecuario, el cual le dará más apoyo al sector campesino. Además, para ese sector viene la reforma agraria, en la cual se deben ejecutar vías terciarias y el programa Mi Casa Ya. En el debate que tenemos sobre reforma agraria siempre se tiene énfasis en estos dos programas. Si se entregarán tierra a los campesinos, hay que ofrecerles líneas de crédito, oportunidades de comercialización, entre otras cosas”, subrayó.

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