El macabro contador de crímenes en contra de los líderes sociales en el país no para y en la tercera semana de noviembre de 2022 llegó a siete con el homicidio de Carlos Andrés Posada en Ituango (Antioquia), pese a que el gobierno del presidente Gustavo Petro ha tendido su mano para que los grupos armados ilegales se sumen a su política de paz total.
Según informaron en el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), hombres armados llegaron hasta su vivienda para ultimarlo el lunes 14 de noviembre.
La ONG indicó que esta nueva víctima era uno de los representantes de la comunidad de la vereda de Mandarinos, donde fue presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) y que de allí tuvo que desplazarse por las amenazas que recibió. También destacaron que estuvo al frente del retorno de 4.000 personas que tuvieron que huir de ese territorio hacia Urabá en 2021 que en la actualidad estaba trabajando en proyectos productivos y de infraestructura.
También, la Fundación Sumapaz informó de este nuevo crimen en contra del líder social y recordaron que recientemente había retornado porque su vida estaba en riesgo.
“Hace un año fue amenazado y desplazado, por está razón dejó la presidencia de la #JAC. Regresó a la vereda a recuperar su proyecto. Ayer, hombres armados acabaron con su vida”, indicaron.
Desde la Gobernación de Antioquia también se solidarizaron con los allegados de Posada y le pidieron a las estructurales criminales que cesen la violencia en contra de la población civil.
“Solidaridad con su familia y con las JAC. Pedimos celeridad en la investigación para que este crimen no quede en la impunidad. Y le hacemos un llamado a los grupos armados para que demuestren su verdadera voluntad de paz.”, señalaron.
Por su parte la Defensoría del Pueblo se sumó a las voces de rechazo por este nuevo homicidio y también pidieron a los violentos que atiendan el llamado del presidente Petro y no ataquen más a los civiles.
“Condenamos el asesinato (...) En 2020 emitimos la #AlertaTemprana 004-2020 en la que se advirtieron los riesgos a las vulneraciones de los #DDHH y #DIH. (sic)”, señalaron. “Entre el 1 de enero y el 30 de septiembre del 2022 se presentaron 15 homicidios en #Antioquia. Reiteramos el llamado a los grupos armados ilegales para que cesen las acciones contra la población civil y hagan parte de la propuesta de #PazTotal del Gobierno (sic)”.
En Indepaz informaron que con este nuevo homicidio se llega a 163 líderes sociales asesinados en lo corrido de este 2022, y 1.390 desde la firma del acuerdo de paz entre el Estado colombiano y la extinta guerrilla de las Farc.
Previo a este crimen se tenía el reporte de los homicidios de cuatro líderes indígenas: Francisco Sarco Pipicay, de 29 años, y Carlitos Urágama Cano, de 23 años; ambos eran integrantes de la Asociación de Víctimas Indígenas del Chocó y los ultimaron en zona rural de Quibdó. Juvencio Cerquera, que era integrante de la Guardia Indígena y que asesinaron en Sotará (Cauca). Y de Armando Hanipe Cabrera, quien murió cuando trataba de mediar en una riña en Nuquí (Chocó).
En noviembre también se tuvo el reporte de los homicidios de Dositeo Ojeda Mena en Taminango (Nariño) y de Edgar Ayala Pinto, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) del barrio Ciudad Rodeo, en el occidente de Cúcuta (Norte de Santander) donde le quitaron la vida.
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