Paul Nguyen, de 27 años, de nacionalidad vietnamita y estadounidense, que vivía en California, donde había finalizado sus estudios universitarios recientemente, llegó a Medellín el pasado 6 de noviembre en compañía de un amigo. A través de la aplicación de citas Tinder conoció a una mujer y decidió salir con ella a un restaurante de la ciudad. Luego apareció muerto.
En vez de encontrarse en el restaurante, la mujer le propuso mejor tener la cita en la zona rosa de la 70 en Laureles. Sus amigos no supieron nada más de él, hasta que apareció su cadáver sin documentos ni pertenencias tirado al lado de un basurero en el sector de El Cucaracho en Robledo. Tenía signos de una aparente sobredosis de escopolamina.
“Conoció a una chica por Tinder a la cual invitó a comer a un restaurante en El Poblado y desde ese día no se supo más hasta dos días después que lo reconocimos en Medicina Legal”, contó su amigo para Blu Radio.
Ya el cuerpo de Paul fue trasladado a Medicina Legal, a donde llegó como un ‘NN’, pero luego su amigo lo identificó y ahora espera adelantar los trámites de repatriación lo más pronto posible para poderlo enterrar en una funeraria de California. Mientras tanto, la Policía adelanta las investigaciones correspondientes para dar con los responsables de la muerte del extranjero. Cabe mencionar que hay una pista muy importante: la mujer con la que se fue a encontrar Paul, fue registrada en una fotografía que el hombre publicó en sus redes sociales.
Con este caso, ya van 25 extranjeros muertos en la capital antioqueña en extrañas circunstancias en lo que va corrido del 2022, algo que tiene alarmadas a las autoridades.
Justamente esta misma semana, el cuerpo de un ciudadano estadounidense llamado Nicolas Vicent Flattes, que tenía 56 años, fue encontrado en una residencia en el barrio Belén. Según dijeron las autoridades, los vecinos se alertaron porque el hombre llevaba varios días sin responder a sus llamados, y no fue hasta que un fuerte olor empezó a emanar del apartamento, que una mujer decidió entrar y lo encontró tendido en el suelo y llamó inmediatamente a la Policía.
El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación llegó hasta el inmueble, que el norteamericano había alquilado desde el pasado 22 de septiembre, y corroboró su muerte. No se encontraron signos de violencia, por lo cual se descartó de momento un homicidio. No obstante, su cuerpo ya está en el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses para determinar las verdaderas causas de su muerte.
“Al llegar el cuadrante informa que encuentra el cuerpo sin vida del masculino acostado sobre la cama, de nacionalidad americana y en avanzado estado de descomposición. Los vecinos manifiestan que hace tres semanas había arrendado la habitación y desconocen las causas de la muerte”, indicó la Policía Nacional en su reporte.
Lo que se sabe de Nicolas Vicent Flattes es que era de Springfield, Massachusetts. Ya había estado en Medellín antes, de hecho, la de este año era su tercera visita; estuvo en la capital en 2018 y 2021 también. En sus redes sociales dice que era amante del atletismo y un viajero frecuente.
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