Gustavo Petro asegura que Colombia alcanzaría la paz en breve si EE. UU. cambia su política antidrogas

El mandatario explicó que Estados Unidos cumple un rol decisivo en cómo se puede orientar esta lucha en los próximos años, señalando que es capaz de llevar violencia o paz a América del Sur

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Gustavo Petro habló sobre la necesidad de reorientar la lucha contra las drogas por parte de los Estados Unidos durante el Foro de París por la Paz. Foto: REUTERS/Gonzalo Fuentes
Gustavo Petro habló sobre la necesidad de reorientar la lucha contra las drogas por parte de los Estados Unidos durante el Foro de París por la Paz. Foto: REUTERS/Gonzalo Fuentes

Este viernes en declaraciones a los medios al término del Foro de París por la Paz en territorio francés, el presidente Gustavo Petro señaló que si Estados Unidos modificara su política antidrogas y pusiera fin a la criminalización del consumo, podría contribuir a que se llegue a la paz en Colombia “en cuestión de meses”.

El mandatario hizo énfasis en la importancia de pasar de un proceso en el que se combate la producción y transporte de drogas ilegales, a uno donde se encare la situación desde la perspectiva de la salud pública:

“Rehacer una política antidrogas a partir de la prevención de la salud pública y no de la criminalización, casi que podría llevar a Colombia a la paz en cuestión de meses. Eso depende de los Estados Unidos”

Es por eso que Petro pidió al presidente estadounidense, Joe Biden, que se transforme en un “militante de la paz”, destacando que el país del norte tiene rol fundamental en ese proceso al señalar que fue el que durante los años setenta estableció la lucha contra las drogas como una política de Estado que perdura hasta hoy:

“Estados Unidos tiene un papel determinante porque, dependiendo de su política de drogas, se lleva violencia o paz a América del Sur”.

Dentro de su argumentación, Petro sostiene que la política represiva que puso en marcha el presidente Richard Nixon hace medio siglo, cuando declaró el abuso de drogas como “enemigo número uno”, dejó como consecuencia, y a partir de entonces, “un millón de latinoamericanos muertos”.

Por otro lado, el presidente colombiano se mostró orgulloso de que la propuesta que lanzó para que se reduzca la deuda de países en desarrollo a cambio de inversiones en acción climática con el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI) haya “sido acogida como la agenda del sur”. Declaró que dicha agenda necesita ser fortalecida para lograr los resultados esperados en materia de sostenimiento y cambio climático.

Dicha propuesta fue realizada por Petro en el marco de la 27 Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático celebrada por estos días en Sharm el-Sheij, Egipto. Respecto a su participación en esta cumbre, consideró que la misma ha dejado a Colombia “como una de las vanguardias de la actualidad”.

Sin embargo, también expresó que sentía “un sinsabor” al recalcar que desde la Conferencia de 2015 que dio lugar a los Acuerdos de París en la que los países participantes alcanzaron una serie de acuerdos para combatir el cambio climático, “todas las promesas se han incumplido” desde entonces. También advirtió que si no hay financiación internacional, eso podría equivaler a una situación de “sálvese quien pueda” que al final implica un escenario de “muerte o el éxodo masivo” para los que él llamó “pueblos vulnerables”.

Petro también señaló el peligro de este escenario, al considerar el auge que vive el ascenso de gobiernos de extrema derecha (o apoyados por esta) entre las potencias mundiales:

“En la medida en que las extremas derechas van tomando gobiernos en el mundo rico o forman parte de gobiernos, hay una especie de política de desechar a los pueblos pobres que en la crisis climática significa la muerte”

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