Ante su ausencia en la Cámara de Representantes, una iniciativa del excongresista y hoy director del Icetex, Mauricio Toro, resucitó este jueves 3 noviembre en cuerpo ajeno. La representante de la Alianza Verde por el departamento de Risaralda, Carolina Giraldo Botero, radicó nuevamente el proyecto de ley para establecer restricciones a los esfuerzos de cambio de orientación sexual, identidad y expresión de género (ECOSIEG), mal conocidos como terapias de conversión.
Este término encierra todos los medios y técnicas conductuales, psicoanalistas, médicas, religiosas y espirituales que tienen como finalidad cambiar, revertir, impedir o reprimir la orientación sexual, identidad de género y expresión de género de una persona, según lo explica la Asociación Americana de Psicología.
Tienen varias finalidades: cambiar una orientación sexual a la heterosexual, cambiar una identidad o expresión de género diversa a cisgénero, cambiar una expresión de género diversa a una alienada al sexo asignado al nacer, reprimir, reducir o impedir una orientación sexual no heterosexual, reprimir, reducir o impedir la identidad de género de una persona no cisgénero, y reprimir, reducir o impedir expresiones de género.
Conforme con el Consejo de Derechos Humanos Naciones Unidas, los ECOSIEG han sido considerados como acciones de naturaleza discriminatoria, cruel, inhumana y degradante, que implican un riesgo considerable de tortura a partir de la noción errónea de que la diversidad sexual y de género son patologías aptas de tratar, corregir o cambiar.
Durante su paso por el Congreso, Toro intentó promover una iniciativa para prohibir estas terapias. No obstante, esta fue obstaculizada con todo tipo de estrategias, como recusar al propio congresista por un supuesto conflicto de intereses —dado que Toro fue el primer congresista abiertamente homosexual y estaba presentando un proyecto que beneficiaría a las personas homosexuales, equiparando una orientación sexual con un gremio u ocupación—. Finalmente, la iniciativa se archivó.
Con el cambio de legislatura, la representante verde radicó otro proyecto de ley en el mismo sentido. A ella la acompaña Alejandro García Ríos, representante del mismo departamento por el mismo partido, y Gloria Liliana Rodríguez Valencia, representante verde por Bogotá. También se le unieron las senadoras Angélica Lozano, del mismo partido, y Sandra Ramírez, del partido Comunes.
También firmaron la iniciativa varios representantes del Pacto Histórico: Etna Argote, representante por Bogotá, Andrés Cancimance, representante por Putumayo, María del Mar Pizarro, representante por Bogotá, y Susana Boreal, representante por Antioquia. Asimismo, se unieron Juan Carlos Losada, representante liberal por Bogotá, y Daniel Carvalho, representante independiente por Antioquia. En el acto de radicación también estuvo la viceministra de Relaciones Exteriores, Laura Gil.
“¡Una buena noticia! Hoy radicamos en compañía de varios colegas y organizaciones sociales el proyecto de ley #Inconvertibles que Mauricio Toro impulsó en la legislatura pasada y que tristemente no fue aprobado. ¡Esta vez lo lograremos!”, escribió la congresista Giraldo.
Entre las disposiciones de este proyecto de ley está la capacitación para el personal de salud con enfoque de diversidad, el no uso de fondos públicos para promover y practicar estas terapias de conversión —ni contratación con personas que los promuevan—, la prohibición de publicidad y eventos masivos orientados a estas terapias, entre otras medidas de contención.
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