Padre e hija fueron baleados en plena calle en Cartagena: los sicarios están identificados y se ofrece millonaria recompensa

Jaime Antonio Llorente fue por sus tres hijas al colegio antes de que sicarios lo interceptaran y acabaran con su vida y la de una de sus hijas

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Imagen de referencia. Jaime Antonio Llorente fue por sus tres hijas al colegio antes de que sicarios lo interceptaran y acabaran con su vida y la de una de sus hijas. Foto: Colprensa
Imagen de referencia. Jaime Antonio Llorente fue por sus tres hijas al colegio antes de que sicarios lo interceptaran y acabaran con su vida y la de una de sus hijas. Foto: Colprensa

Una tragedia enluta hoy no solo a una familia, sino a la comunidad educativa y la sociedad en general de Cartagena. Un hombre y su hija de diez años fueron vilmente asesinados por sicarios que los interceptaron cuando se movilizaban en una camioneta.

Los hechos ocurrieron luego de que el comerciante, identificado como Jaime Antonio Llorente Arcia, fuera por sus tres hijas de 9, 10 y 11 años de edad al colegio Biffi culminada la jornada escolar.

De acuerdo con las primeras versiones de los hechos, la mañana transcurrió con normalidad. Como era común, el padre de familia fue por sus hijas hacia las 2:30 de la tarde para llevarlas a su hogar. Alejandra Llorente, la menor de 10 años decidió sentarse en la silla del copiloto para el recorrido desde la institución hasta su casa.

Cuando Jaime Antonio Llorente paró en el semáforo ubicado antes del camino que lleva a la Bomba del Gallo o al barrio Ternera, sicarios que se movilizaban en una motocicleta lo interceptaron y sin mediar palabra empezaron a disparar, pese a que en el interior de la camioneta había tres menores de edad.

El comerciante recibió dos disparos que le cegaron la vida. Por su parte, las menores de 9 y 10 años también fueron víctimas de los impactos de bala.

Al notar el ataque sicarial y tras la huída de los asesinos, la comunidad se acercó al vehículo para auxiliar a sus ocupantes. El padre de familia ya había fallecido pero las menores de edad continuaban con vida pese a las heridas.

Las niñas fueron trasladadas a un centro asistencial con el objetivo de salvarles la vida. La menor de edad que presentaba mayores complicaciones en su salud era alejandra, de 10 años, quien tuvo que ser intervenida quirirjicamente apenas llegó a la clínica.

Pese a los esfuerzos de los profesionales de la salud, la niña que iba de copiloto no corrió con la misma suerte de sus hermanas y falleció hacía las cinco de la tarde en el centro asistencial.

De acuerdo con algunas versiones reveladas por medios de comunicación local, este viernes 4 de noviembre sería el último día de clases de las niñaspues salían a vacaciones de fin de año. Con motivo de recibir la temporada de receso, hoy se llevarían a cabo diferentes actividades artísticas y culturales en el Colegio Biffi; sin embargo, el lamentable hecho de violencia que acabó con la vida de una de sus estudiantes llevó a la cancelación de toda la agenda.

En cambio de los actos folclóricos y musicales que docentes y estudiantes habían preparado para este viernes, la institución educativa religiosa llevará a cabo una misa con estudiantes, docentes, padres de familia y todo aquel que quiera participar. La eucaristía se realizará a las 10:00 a. m.

Autoridades investigan el doble homicidio que enluta a una familia en Cartagena

Luego de reportarse el caso de sicariato en el barrio La Providencia de Cartagena, las autoridades iniciaron las respectivas labores de investigación para establecer los móviles del crimen, así como los responsables del lamentable hecho.

El general Nicolás Zapata, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, confirmó que ya se está recolectando todo el material que sirva para establecer la identidad de los asesinos y otros detalles del crimen.

En el desarrollo de las labores investigativas, se recopila las grabaciones de cámaras de seguridad del sector La Providencia, donde ocurrieron los hechos. Así mismo, las autoridades indicaron que el comerciante no había reportado amenazas en su contra.

“Reportamos que la víctima no tenía amenazas, según sus familiares, y tampoco tenía antecedentes judiciales, por el contrario, era una persona que se dedicaba a actividades comerciales”, indicí el comandante Zapata, citado por el diario local El Universal.

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