El 6 y 7 de noviembre de 1985 Colombia fue testigo de uno de los hechos más violentos que vivió la capital del país: la llamada toma y retoma del Palacio de Justicia. En los hechos, que dejaron 94 muertos y 11 desaparecidos, un peculiar elemento logró ser rescatado de las llamas que consumieron el recinto judicial, el ‘Cristo del Palacio de Justicia’, que este jueves fue declarado como bien de interés cultural para el Estado.
El crucifijo, que fue colgado en la sala de audiencias de la Corte Suprema de Justicia en 1983, sería, sin saberlo, testigo directo de los hechos que ocurrirían en el edificio dos años después. El 6 de noviembre de 1985, un grupo de guerrilleros del M-19 se tomó el recinto por más de 48 horas, donde trabajadores y visitantes pasaron momentos de terror.
Mientras el Palacio de Justicia se consumía en llamas y era atravesado por las balas, uno de los magistrados que sobrevivió a la toma, Hernando Baquero Borda, rescató de los escombros el crucifijo, lo conservó y, posteriormente, lo devolvió a la Corte, donde hoy reposa en la Sala Plena.
Aunque el crucifijo resultó incinerado en más de un 60 %, incluyendo su rostro, manos, torso y espalda, la imagen se convirtió en un simbolo en memoria de las víctimas que dejó la toma y retoma del Palacio de Justicia, así lo conoció Blu Radio.
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“El Cristo es un testimonio de los hechos ocurridos en el denominado holocausto del Palacio de Justicia ocurrido el 6 y 7 de noviembre de 1985, pues muestra las huellas del horror, de la violencia desmedida; siendo además evidencia de superación, reconciliación y supervivencia de las instituciones del Estado. Más que una connotación religiosa, el Cristo es un símbolo que ha cobrado un sentido de memoria como homenaje a las víctimas del holocausto del Palacio de Justicia”, se lee en la resolución 0401 del Ministerio de Cultura.
Bajo esos argumentos, en una ceremonia solemne celebrada en el recinto de la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia el Ministerio de Cultura declaró el crucifijo como Bien de Interés Cultural del Ámbito Nacional mediante la resolución 0401.
Con la medida, el cristo construido en yeso y madera, se convirtió en el primer bien mueble en recibir dicho reconocimiento.
En la ceremonia, que contó con la participación de la ministra de Cultura, Patricia Ariza Flórez, los presidentes de las Altas Cortes y magistrados y la directora de Patrimonio, Marcela Cristina Cuéllar, también contó con la asistencia de la señora Susana Sampedro de Baquero y Hernando Baquero Sampedro, esposa e hijo del exmagistrado Hernando Baquero Borda, quien fue asesinado ocho meses después de la toma del Palacio por un sicario de Pablo Escobar.
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Tras la firma de la resolución que establece las diferentes medidas para la conservación de la figura, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, el magistrado Aroldo Wilson Quiroz Monsalvo, señaló que el Cristo es un símbolo muy importante para sus 30.000 funcionarios.
“Símbolo de resistencia, supervivencia y renacimiento; invita a sobreponerse al horror, el Cristo invita a reflexionar sobre el conflicto en Colombia y desde allí pensar y trabajar por una Nación en paz”, expresó Quiroz.
A renglón seguido, el alto magistrado concluyó: “El Cristo a mis espaldas en este momento, se salvó del holocausto de 1985, que ahora nos acompaña en el fortalecimiento de la justicia en Colombia. La paz es justicia”.
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