Capturan a española que le habría robado 25 mil millones de pesos a los dominicos de la Universidad Santo Tomás en Bogotá

Por redes sociales, la Universidad Santo Tomás difundió un comunicado en el que denunció que fue víctima de fraude por parte de una ciudadana española que se hacía pasar por empresaria para robar a las personas que adquirían un supuesto portafolios de inversión con entidades financieras, en el mes de abril.

De acuerdo con el comunicado de prensa, el robo fue ejecutado por una mujer identificada como Ruth del Pilar Almeyda Martín, que se hacía pasar por la representante legal de Pal Asociados; y de acuerdo con la W Radio, tras meses de investigación, la mujer fue capturada en las últimas horas por parte del el CTI de la Fiscalía General de la Nación.

Recordemos sobre PAL Asociados SAS -que reúne las siglas de su nombre- una empresa con 35 empleados, con oficina en el barrio La Castellana, de Bogotá, se presentaba como una compañía “para la asesoría en el manejo de sus inversiones, la aplicación de las normas contables internacionales y el manejo de sus divisas”, en la que participa(ban) familiares de Pilar. Dicha asesoría buscaba “crear un entorno en el que el proceso de inversión tenga prioridad”, y usaba como eslogan “Transformamos empresas” (como, al parecer, lo hará con la USTA).

En el mes que fue denunciado el hecho, la universidad sacó un comunicado de prensa en el que aclaro algunos temas, comenzando por la cifra que le había sido robada. “El presunto fraude del que la Institución ha sido víctima, se aproxima al monto de seis mil millones de pesos, y no a la cifra difundida por algunos medios de comunicación, hecho que de ninguna manera disminuye la gravedad del asunto”, anotó la universidad en ese momento, pues en algunos portales se señaló que el robo había sido por 20 mil millones de pesos.

En su carta, la institución, también, aclara que la denuncia se hizo entre varias organizaciones víctimas de fraude por parte de Almeyda Martín entre esas las que hacen parte de la Comunidad Dominica (el Colegio Jordán de Sajonia, el convento de las dominicas en Tunja y la provincia de los Dominicos, entre otras): “La Universidad Santo Tomás, junto con otras instituciones afectadas, radicó ante la Fiscalía General de la Nación, la denuncia penal correspondiente, y el caso es materia de investigación”, se lee en la misiva, difunda en redes sociales.

En su momento, Fray José Gabriel Mesa Angulo, que sería el “director espiritual” del expresidente Iván Duque, señaló que tras sacar el dinero de las cuentas, Pilar Almeida, que era de toda su confianza, apagó el celular y desapareció.

“Hay un monto que estamos tratando de investigar, que cuando hicimos una averiguación con los bancos, concretamente con dos entidades bancarias, nos dimos cuenta de algunas inconsistencias y pues estamos indagando un poco la situación y ya la pusimos en conocimiento de la Fiscalía”, dijo el capellán de la Casa de Nariño en entrevista con la emisora mencionada.

1. No utilizar, durante el proceso de compras, conexiones de redes desconocidas o libres de wifis.

2. Procure comprar productos o adquirir servicios en línea en sitios colombianos conocidos o con presencia en Colombia, o en portales que más que una tienda, son intermediarios entre compradores y vendedores, los cuales cuenten con políticas de servicios bien definidas y de acceso al consumidor.

3. Analizar y descartar, si es necesario, ofertas de productos o servicios de difícil creencia o proveniencia. Contar con el candado en la parte superior de una página web es imprescindible, pero este no asegura la posibilidad de ser estafado. A demás, tener en cuenta la calificación y reputación de la página o del vendedor, ya que allí se puede evidenciar experiencias y con esto tomar decisiones más asertivas.

Cabe resaltar que los portales donde se realizan estas compras deben publicar un aviso legal con información al detalle de las políticas de protección de datos, así como los pasos sobre las normas de cancelación de pedidos y de garantía o devolución.

4. Los consumidores deben constatar la existencia de un canal directo de atención al cliente que este activo y de respuesta oportuna e inmediata, asimismo, que cuente con una dirección física o información del contacto, empresa o emprendimiento.

5. No guardar los datos del método de pago y/o utilizar tarjetas de prepago o digitales de compra por internet, otras de las opciones sugeridas es realizar el desembolso del dinero a través de la opción PSE.

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