Padres acusan a las directivas de un colegio de Bogotá de negligencia por accidentes de sus hijos

El más reciente accidente ocurrió el pasado 6 de septiembre, cuando, Alejandro Silva, de grado octavo, terminó con una fractura diafisaria de cúbito y radio expuesta

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FOTO: COLPRENSA
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Ya son varias las denuncias de presunta negligencia que recaen sobre el Colegio San Rafael de Alicante, institución privada del barrio Santa María del Lago, Engativá. De acuerdo con lo que denunciaron varios padres de familia ante los micrófonos del noticiero de CityTv, sus hijos han resultado lesionados dentro del plantel educativo, así mismo, no han recibido, de manera completa y correcta, el tratamiento para cuidar aquellas afectaciones de salud.

El más reciente accidente ocurrió el pasado 6 de septiembre, cuando, Alejandro Silva, de grado octavo, terminó con una fractura diafisaria de cúbito y radio expuesta. Según Maryuri, mamá del menor, luego de recoger a su hijo para llevarlo a que le prestaran atención médica, se dio cuenta que el seguro que tenía al menor tenía irregularidades. “Nos dijeron que no lo podían recibir por la complejidad de la lesión y que debía ser canalizado. (...) Nos tocó recorrer varios hospitales y en ninguno nos lo recibían, hasta que llegamos al Hospital Infantil Universitario de San José”, señaló Leidy Rubio, tía del menor.

A este caso se sumó Mery, abuela de una niña de 6 años que, al igual que Alejandro, tuvo un accidente en aquella institución académica. que en junio de este año tuvo un accidente dentro del colegio. “Mi nieta se cayó y ellos jamás nos avisaron. Nos enteramos porque la niña nos contó. (...) Nos tocó asumir todos los gastos y ella duró 15 días con férula y el colegio nunca respondió”, dijo.

En su momento, de acuerdo con audios a los que tuvo acceso el diario El Tiempo, Rubiela Amador, coordinadora del colegio, dijo, para el día del suceso, que el golpe no era para tanto. “El golpe no fue como para entablillar, le aplicamos una cremita (...) como siguió jugando no se le avisó”, se escucha.

Durante el primer semestre de este año, Myriam Cadena, abuela de otra menor de cuatro años de edad, resaltó que su nieta, un sábado, amaneció emanando sangre de su cuerpo sin razón alguna. “Un sábado la niña se despertó y empezó a botar sangre. Resulta que un día antes la dejaron caer y no dijeron nada. Cuando fuimos a confrontar al colegio dijeron que otro niño se había golpeado y cuando la profesora salió por el hielo mi niña se cayó”, comentó.

(Colprensa - Camila Díaz)
(Colprensa - Camila Díaz)

Ante las múltiples denuncias, el colegio hizo pública una comunicación en la que argumentaba que los alegatos estaban siendo hechos por personas inescrupulosas que solo buscaban desprestigiar el colegio bajo una serie de acusaciones sin fundamento. Leidy, de acuerdo con lo que dijo a CityTv, ha recibido ataques por parte de la institución, supuestamente, a modo de represalia por sus denuncias.

“Mi hijo Jerónimo (quien también estudiaba en el colegio) me dijo que estaban hablando mal de mí y que había unas carteleras con fotos de la familia por todo el colegio con esos mensajes”, contó al destacar que ya existe una denuncia radicada ante la Fiscalía, en la unidad de Seguridad Pública y Amenazas. El caso, a su vez, llegó hasta la Dirección Local de Educación.

Desde la Secretaría de Educación se definieron tres acciones para abordar la situación: ”1. Desde el colegio se debe iniciar articulación con la estrategia JER (justicia escolar restaurativa) para garantizar la realización de acciones de reparación para todos los involucrados (docentes, directivos docentes, orientadoras, padres de familia y estudiantes). 2. Para garantizar el derecho a la educación de los estudiantes se programa de manera provisional que los estudiantes realicen trabajo en casa con comunicación sincrónica virtual y con cámara, para dar continuidad a la formación académica. 3. El colegio debe revisar la póliza de accidentalidad estudiantil contratada verificando su cubrimiento y causal de la no atención al estudiante o no cubrimiento del valor del accidente”.

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