El pasado martes 25 de octubre se llevó a cabo un intenso debate (como era de esperarse) en el Senado de la República sobre la aprobación de un proyecto de ley que busca la modificar el servicio militar obligatorio en Colombia. La reforma, que es de autoría del senador Humberto de la Calle Lombana y el representante Daniel Carvalho, busca habilitar a los jóvenes para que puedan prestar en diferentes funciones sociales su servicio.
El tema ha sido polémico en el panorama nacional, varios comentarios apoyando o cuestionado vehemente el proyecto de ley se han generado, especialmente en la oposición que ha criticado la iniciativa de la Alianza Verde. Una muestra de ello fue la crítica que realizó el mayor general retirado del Ejército Nacional Juvenal Díaz Mateus, quién indicó tras el complejo debate:
“La eliminación del servicio militar obligatorio es un atentado contra la seguridad nacional. ¿Quieren que no sea obligatorio? Perfecto, páguenles 1.600.000 pesos a los soldados regulares, es más justo que 800.000 pesos a un criminal. Es tiempo de incentivar la legalidad”, trinó en su cuenta de Twitter.
Respecto a las confusiones el ministro del Interior Alfonso Prada indicó que el servicio militar obligatorio no se acabó tal cual lo han desinformado algunos políticos.
“Nos entregaron la facultad y la responsabilidad de reglamentar, el ministro de Defensa con el Gobierno Nacional tendremos que avanzar en esa reglamentación (servicio social para la paz), va a ser progresivo, además lo digo con contundencia, acá no se eliminó el servicio militar obligatorio, no se trata de acabarlo pero sí de abrir una alternativa”, comentó a la emisora radial La W.
El jefe de la cartera del Interior Alfonso Prada, resaltó en el medio de comunicación que se trata de nuevas posibilidades para que los jóvenes puedan elegir la manera de prestar su servicio, brindándole un beneficio a la comunidad sin la necesidad de estar empuñando un arma.
“Muchos jóvenes puedan ayudarnos por ejemplo en lo que se refiere a la alfabetización digital en zonas rurales y urbanas, para que los niños y los jóvenes que no han tenido la posibilidad de manipular de manejar, conocer poder utilizar un computador y todas la herramientas digitales que ello conlleva puedan usarla. Van a poder prestar también el servicio social en territorios de paz étnica, territorial, cultural en protección de la naturaleza, de la biodiversidad, de las fuentes hídricas. Es decir se abre una posibilidad inmensa que los jóvenes puedan ayudar la calidad de vida de los colombianos en los territorios y no necesariamente con las armas”.
Por último enfatizó que el proyecto de ley no se presentó con la intención de disminuir las Fuerzas Armadas, sino por el contrario garantizar la seguridad de los integrantes de la Policía y Ejército, además de recordar el lamentable atentado en el que fallecieron 3 auxiliares junto a 1 intendente y 3 patrullero de la Policía Nacional en la vereda Corozal, corregimiento de San Luis, jurisdicción del municipio de Neiva (Huila).
“El caso de los jóvenes que fueron asesinados vilmente en un territorio que puede perfectamente en el occidente de Huila ser un territorio de paz, fueron asesinados por estructuras criminales y eran jóvenes simplemente bachilleres (de la Policía Nacional) que no tenían por que estar allí exponiendo sus vidas y terminaron siendo asesinados. Esos jóvenes van a tener la posibilidad en ese mismo territorio prestar un servicio social, un servicio ambiental diferente. Esto además enmarca en ese concepto de Paz Total en donde en muy pocos años no tengamos en Colombia que ir al servicio militar sino en un territorio donde hay paz tengamos la oportunidad de que nuestros jóvenes presten servicios sociales alternativos diferentes”, concluyó a La W, el ministro del Interior Prada.
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