El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, desmintió este martes 25 de octubre los rumores de una supuesta modificación en el metro que se construirá en Bogotá. Se especulaba que el presidente Gustavo Petro había tenido una reunión secreta con miembros de las empresas Harbour Engineering y Xi’An Metro para solicitarle que la línea fuera subterránea.
Lo cierto es que el jefe de cartera manifestó en una entrevista con el diario El Tiempo que sí hubo un encuentro; sin embargo, sería para conocer los avances del proyecto del Metro. “Nosotros pagamos el 70 % de la obra, queremos saber cómo se está haciendo”, afirmó Reyes.
Por otro lado, enfatizó en que el Gobierno nacional no ha dado “pautas, ni lineamientos, ni recomendaciones, porque eso es un proyecto ya contratado que no se puede modificar. No obstante, eso sería contrario a lo que dijo durante el Congreso de Autoridades de Tránsito que se realizó en Cartagena la semana pasada.
De acuerdo con el mismo medio de comunicación, en ese congreso comentó que habían solicitado estudiar “la posibilidad de que una parte del trazado de la Avenida Caracas sea subterránea por el impacto ambiental y urbanístico”. Esas palabras no serían una orden en sí, sino una preocupación. “Simple y llanamente porque no queremos que en un futuro se diga que nadie revisó el impacto que tendría esa parte”, agregó.
Aunque Guillermo Reyes confirmó el encuentro, la respuesta que le dio la oficina de prensa de Presidencia al diario fue totalmente distinta: esa reunión nunca habría sido programada ni tampoco estaría en la agenda del primer mandatario.
La primicia de la reunión con Harbour Engineering y Xi’An Metro
La Silla Vacía conoció por una fuente de primera mano sobre la reunión en la Casa de Nariño, la cual no estuvo incluida en la agenda oficial del jefe de Estado; sin embargo, el primer mandatario sí le habría pedido al consorcio chino que revisara el diseño de la primera línea del Metro, en algunos tramos.
Lo que habría solicitado el presidente sería los costos y tiempos adicionales que acarrearía una línea diferente a la que está pensada. Es importante recordar que la idea de un metro subterráneo fue defendida por Petro mientras fue alcalde de Bogotá de 2012 a 2015.
Al parecer, en el encuentro estuvieron ―además del jefe de Estado, el ministro de Transporte― la viceministra de infraestructura, María Constanza García y miembros del consorcio conformado por las empresas chinas. De acuerdo con el medio digital, a la reunión no fueron invitados la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, ni el gerente del Metro, Leonidas Narváez.
El Tiempo aseguró que la Alcaldía de Bogotá le manifestó que no tuvo conocimiento de esa reunión. Por su parte, la Silla Vacía obtuvo una entrevista con el jefe de Gabinete del distrito, Antonio Sanguino, pero no se refirió a los rumores mencionados. “El contrato está en firme y en ejecución, sin ninguna solicitud formal de modificación de nadie ―puntualizó― Y nosotros seguimos con la primera línea tal como fue contratada”.
El primer vagón del Metro
Tras viajar 65 días por mar desde el puerto de Tianjin, en China, el pasado 19 de octubre arribó al puerto de Barranquilla (Atlántico) el primer vagón del metro de Bogotá. La estructura hará parte de la primera línea del esperado transporte público de la capital.
“Llegó a puerto colombiano el primer vagón del @MetroBogota”, indicó la alcaldesa en su cuenta de Twitter. A partir de diciembre, estará abierto al público en frente del parque Simón Bolívar, para que los ciudadanos puedan familiarizarse con el sistema.
Según la Empresa Metro de Bogotá, cada uno de los trenes contará con seis vagones, los cuales tendrán una capacidad para transportar 1.800 pasajeros. El primer tramo irá desde el Portal de las Américas hasta la avenida Caracas, pasando por la avenida Villavicencio, la avenida Primero de Mayo, la calle 8 sur y la calle 1, donde girará por el norte hacia la avenida Caracas hasta la calle 78.
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