El presidente Gustavo Petro anunció nuevas modificaciones al proyecto de reforma tributaria que cursa en el Congreso de la República y tendrá segundo debate en los primeros días de noviembre.
Las nuevas modificaciones están relacionadas con el gravamen a las pensiones más altas, de 10 millones de pesos o más, y la tributación del sector de hidrocarburos que trabaja con bienes públicos, en el sentido que se van a mantener las regalías para que estás no sean deducibles en el impuesto de renta.
Así las cosas, el recaudo de este proyecto ya no será ni de 25 billones de pesos, como se estableció cuando se presentó el proyecto en el Congreso ni de 22 o 23 billones de pesos, tras las primeras modificaciones sufridas entre los que se encuentran gravámenes a las donaciones de empresas a entidades sin ánimo de lucro, así como gravámenes a las importaciones de menos de 200 dólares, así como el de impuestos a bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados.
“Alrededor de 20 billones de pesos es el valor del recaudo del proyecto de reforma tributaria para el 2023″, indicó el mandatario tras anunciar las nuevas modificaciones. También precisó que el recaudo puede subir a 23 billones para el 2026.
“La mayor parte de este recaudo tiene que ver con que el Estado capture una mayor renta si los precios internacionales son elevados de los propios bienes del petróleo y el carbón, no de los privados”, aseguró el presidente.
Indefendible
Para el docente Daniel Monroy, investigador en Análisis Económico, lo hecho por el Gobierno nacional en cabeza de Petro es indefendible, pues en primer lugar se habló de un recaudo de 60 billones de pesos, que se había hablado tras la victoria de Petro en elecciones, y ahora ya está en 20 billones.
“De 60 billones de recaudo anunciado en campaña bajaron a 50 billones. Luego a 40 billones, luego a un ‘inamovible’ de 25 billones y ya vamos en 20 billones. Lo de eliminar impuesto a pensiones es no más que acuerdo con oposición y a favor de una minoría ‘rica’. Indefendible”, señaló Monroy.
Por su parte, el economista Andrés Ortiz aseguró que a los colombianos tener a Gustavo Petro como presidente les cuesta 20 billones de pesos de más en pagos a la deuda externa, dinero que pudo haber sido invertido en otras cosas, como el Metro de Bogotá.
“Esa plata plata se va a ir a más pago de la deuda externa porque Petro y la ministra Irene Vélez hicieron que subiera el precio del dólar”, lamentó Ortiz.
A su vez, el exviceministro de Empleo y Pensiones Fredys Socarrás rescató que el mínimo de recaudo sea de 20 billones de pesos, los cuales serían invertidos de manera transparente.
“Lo importante es que la caja sea mínimo 20 billones de pesos anuales, donde harán un esfuerzo adicional quienes tengan mas y reducirán la brecha de desigualdad. Cada peso de esa reforma va a ser invertido con celo y transparencia. Para nada va a ser en casas en el aire o casa museo de la música”, advirtió.
De 20 billones no bajará
El senador Gustavo Bolívar, del Pacto Histórico, aseguró que el Gobierno apuesta a que el proyecto no baje de 20 billones de pesos. De paso, descartó que se baje, incluso, hasta los 12 billones de pesos.
“Queremos que el monto de la tributaria sea el mayor posible para darle un buen mensaje a los mercados internacionales, sobre todo a las calificadoras de riesgo, porque se cree falsamente que si se aprueba una tributaria muy alta, el dólar sube. Es todos lo contrario”, puntualizó el senador.
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