En las últimas horas del domingo 23 de octubre autoridades colombianas informaron de dos golpes en contra de la minería ilegal. Uno en el departamento de Caquetá y otro en Amazonas.
En el primer caso, en el marco del ‘Plan Perseo’ tropas del Ejército Nacional, en conjunto con la Fuerza Aérea Colombiana, en coordinación con la Policía y de manera interinstitucional con el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación, capturaron en flagrancia a cuatro sujetos por el delito de explotación ilícita de yacimientos mineros.
Según compartió la institución militar en un comunicado, “hasta la vereda Las Palmeras, en el municipio de Curillo, departamento de Caquetá, llegaron las tropas del Batallón de Infantería N.° 34 de la Décima Segunda Brigada, para intervenir tres pozos que eran utilizados para la extracción ilegal de minerales, los cuales generaban un significativo flujo de dinero ilícito”.
Durante la operación militar se hallaron cuatro motores que corresponden a dos dragas artesanales, también tres bandas clasificadoras de material aurífero y 100 metros de tubería, entre otros materiales y equipos empleados para esta actividad ilícita.
Cabe resaltar que en el lugar se presentó una protesta social por parte de los habitantes del sector, quienes durante todo el día bloquearon la vía para impedir el paso de la Fuerza Pública, retardando el procedimiento legal pertinente, “pero gracias al entrenamiento de nuestros soldados en el manejo de estas situaciones y la aplicación del mando tipo misión, se evitó que la protesta se tornara violenta”, puntualizó el Ejército.
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La otra operación militar se presentó en Amazonas. Durante el desarrollo de la acción adelantada por la Fuerza Aérea Colombiana y la Policía Nacional, se lograron incautar siete dragas dedicadas a la explotación ilegal de oro en el área del río Puré y Cotuhé, corregimiento de Tarapacá, las cuales afectaban dos de los Parques Nacionales Naturales de Colombia, el Amacayacu y Puré.
La operación contra los delitos ambientales se propinó tras mes y medio de planeación, donde con misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento aéreo de la Fuerza Aérea Colombiana, “se identificaron los lugares en los que se llevaba a cabo las actividades ilícitas de explotación de yacimientos mineros. Una vez en el sitio de los hechos, con el apoyo de las aeronaves de las dos instituciones, hombres de la Policía Nacional inutilizaron las dragas”, informó la autoridad nacional.
Con este resultado, se afectan las finanzas de estructuras de delincuencia organizada transnacional que tenían como fuente de ingreso alrededor de 4.200 millones de pesos mensuales a sus arcas, producto de esta actividad ilegal. Durante la operación no hubo capturados.
Finalmente, la Fuerza Aérea Colombiana aseguró que “se continúa realizando operaciones conjuntas, coordinadas y autónomas, tendientes a la desarticulación de todas aquellas actividades que atenten contra los recursos naturales que afectan y contaminan las fuentes hídricas del Amazonas, y la seguridad de las comunidades indígenas autóctonas de esta zona, quienes viven de la pesca artesanal desarrollada en torno al afluente”.
Con estas dos operaciones, las autoridades judiciales y ambientales de ambas regiones del país lograron contrarrestar las prácticas de contaminación del recurso hídrico, la afectación de especies vegetales y las vidas humanas en la Amazonía colombiana.
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