Una nueva denuncia de abuso sexual sobre una estudiante de la Universidad Nacional se reportó durante la última semana en el interior de la institución.
Los hechos se presentaron el pasado 20 de octubre cuando un grupo de mujeres gritaban dentro de las instalaciones de la universidad a un solo grito contra el abuso sexual que hbaía sufrido una de sus compañeras: “Fuera, machos. Hoy no hay farra, hoy hay rebeldía”.
Además, con un megáfono en mano las alumnas recorrían los pasillos de la instutición preguntando quiénes habían sufrido este tipo de violencia y de esta manera las invitaban a confesar el nombre de los posibles agresores.
Gracias a esta iniciativa llegó un caso a la mesa de género de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional con sede en Bogotá, en donde una joven confesó haber sido abusada sexualmente dentro del establecimiento.
Los sucesos habrían tenido fecha el pasado jueves 11 de agosto, la joven empieza su relato con, “estaba bastante tomada”. Seguido del relato de la víctima contó que luego de quedar sola en medio de la muchedumbre, aceptó bailar con un grupo de hombres que estaba en el lugar. Minutos después, la mujer al sentirse incómoda intentó alejarse, sin embargo, los sujetos no permitieron hacerlo, uno de ellos le dijo “no vas para ningún lado”, ante esta afirmación la joven se sintió insegura.
Después, dos de los presuntos agresores la arrinconaros y besaron en el cuello. En la descripción de de la alumna quien prefirió mantener su identidad en el anonimato contó que mientras ella estaba en shock por la situación, escuchaba a los amigos de los victimarios reír, ella asegura también que se encontraban en estado de licoramiento y se aprovecharon de que ella tenía un vestido. Uno de los agresores puso su mano en sus partes íntimas y al no poder gritar, solo pudo llorar.
“Comencé a llorar y no podía hablar. Entre tres me empezaron a manosear la cintura, la espalda. Me introdujeron los dedos en mi vagina. Lo único que alcancé a decir es que no me hicieran nada, pero ellos siguieron”, dice en el relato que fue recopilado y publicado por la Mesa Feminista La Ramona.
El aterrador testimonio llegó a manos de los directivos de la Universidad Nacional, quienes tienen conocimiento del ‘jueves de Freud’, en el que luego de mediodía, se ven jóvenes tomando trago, consumiendo drogas y bailando en los jardines que están ubicados al lado de las Facultades de Psicología y Enfermería.
A lo que los funcionarios de la institución respondieron que a este evento llegan personas de diferentes lugares, entre estudiantes y forasteros, que consumen y comercializan sustancias alucinógenas, y esta es la razón principal por las cuales no han logrado identificar si los presuntos agresores forman o no parte de la universidad.
Tras los anteriores acontecimientos, en los pasillos de la universidad hay nombres escritos con pintura roja de los posibles abusadores junto con mensajes como: “Aquí gradúan abusadores”. Como reflejo de la inconformidad de las alumnas con los directivos de la Universidad Nacional por no tener las medidas indicadas que ayuden a mitigar la violencia de género.
Para finalizar, el vicerrector de la universidad informó que cuando se conoció el caso, de inmediato se iniciaron los protocolos, sin embargo, la joven aún no ha puesto la denuncia ni tampoco revelado su identidad para brindarle el respectivo acompañamiento que permita establecer responsabilidades disciplinarias y penales contra los agresores.
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