Este miércoles 19 de octubre, durante uno de los numerosos debates de control político a los que ha sido citado ante el Concejo de Bogotá, el secretario distrital de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, aseguró que el problema del tráfico de estupefacientes en la ciudad se ha transformado de microtráfico a narcotráfico. Además, mencionó que las estrategias para enfrentarlo no deben dirigirse a los consumidores, sino a la cadena de transporte y a las finanzas de los grupos multicrimen.
En primer lugar, el funcionario aseguró que esta mutación ocurrió porque ahora existe consumo interno, situación que no estaba generalizada en el pasado. “Aquí no estamos enfrentando un problema de microtráfico, apreciados concejales. Estamos enfrentando un problema de narcotráfico. Hace diez años en Colombia no se consideraba que éramos un país consumidor. Hoy, infortunadamente, lo somos. Al menos el 20 % de la producción de droga que se genera en el país se queda ahora para consumo interno. Eso era una problemática que enfrentamos antes y la dinamización de la violencia viene justamente por el control de esos mercados.”, dijo Fernández.
Además, el secretario anotó que los estupefacientes que se consumen en la ciudad no se producen en ella, sino que “viene del Catatumbo, del Guaviare, el bajo Cauca, de Nariño, a través de las distintas rutas que debemos proteger”.
Fernández añadió que el control de las rentas del narcotráfico no funciona como una única línea de negocio. Por el contrario, se refirió a quienes ejercen el narcotráfico con el término grupo multicrimen —usado también por el presidente de Colombia, Gustavo Petro—, ya que también se disputan los réditos de otras actividades delictivas, como los homicidios y descuartizamientos o el hurto a celulares: “en la ciudad eso es una renta ilícita que puede dejar cerca de 300 o 400 millones de pesos al año en Colombia. Y tengo la plena seguridad de que, si este volumen de recursos se maneja, los grupos multicrimen están detrás de esto”, explicó.
Con respecto a la forma de abordar el problema del narcotráfico en Bogotá, Fernández aseguró que el final de la cadena de consumo no debe ser prioridad para las autoridades. “Aquí tenemos suficientes experiencias para demostrar que la acción de la Policía tiene que estar más enfocada en los eslabones de más alto valor, en las finanzas, en los centros de acopio, en proteger a Bogotá de afuera hacia adentro para impedir que lleguen estas sustancias que dinamizan el delito y la violencia. Tenemos que impedir que lleguen a la ciudad, tenemos que perseguir es los altos valores, los eslabones de alto valor y no el jíbaro o el consumidor”, manifestó el funcionario.
El secretario aseguró que esta forma de abordar el narcotráfico en la ciudad es similar a la idea que tenía el líder conservador Álvaro Gómez Hurtado sobre la lucha contra las drogas. Es, además, similar a lo propuesto por el presidente Petro, pero el cambio no está dándose a la velocidad que Bogotá necesita. “Creo que es hora, concejales, de dar ese cambio y de buscar una aproximación distinta, porque claramente lo que estamos haciendo hasta el momento no está dando resultados; pero nos estamos quedando quietos esperando a que la política se expida para actuar de forma diferencial”.
SEGUIR LEYENDO: