General Torres Escalante aceptó su responsabilidad’ en falsos positivos: otros 17 militares reconocieron crímenes ante la JEP

El exgeneral del Ejército Henry Torres Escalante indicó ante la Jurisdicción Especial para la Paz que cometió crímenes de lesa humanidad además de incentivar de manera indirecta a las unidades a realizar operaciones ilegítimas

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Soldados del Ejército de Colombia. (Colprensa - Diego Pineda)
Soldados del Ejército de Colombia. (Colprensa - Diego Pineda)

Las ejecuciones extrajudiciales o mal llamados ‘falsos positivos’ fueron una oscura parte de la historia del Ejército Nacional que aún trata de esclarecerse. Precisamente en medio de una imputación por parte de la Jurisdicción Especial para la Paz JEP, el general Henry Torres Escalante aceptó su responsabilidad y pidió perdón al Estado, las víctimas y sus familiares.

El uniformado del Ejército Nacional indicó que cometió crímenes de lesa humanidad al igual que incentivó a los subordinados de su Brigada a cometerlos: Asumo con vergüenza el señalamiento como máximo responsable que se me hace en el auto, por los lamentables crímenes de lesa humanidad y de guerra cometidas por hombres bajo mi mando mientras me desempeñé como comandante de la Brigada 16″.

El general Torres mencionó que mediante reconocimientos o llamados de atención verbales se dio cabida a incentivar operaciones ilegítimas en las unidades al mando. “Caí en la irresponsabilidad de hacer comparaciones entre las unidades y exaltación por resultados operacionales, comentarios imprudentes, llamados de atención a algunos comandantes (...) aspecto que sin duda conllevó a incrementar las presiones, llevándolos entre otros motivos, a realizar operaciones ilegítimas”.

El uniformado indicó ante los familiares su responsabilidad y lamentó lo ocurrido en ese oscuro episodio de la historia. “Me pongo en pie ante las víctimas y sus familiares para aceptar con vergüenza la responsabilidad que me corresponde, asumiendo que mis conductas omisivas y la presión a mis subordinados para que, en el desarrollo de las operaciones militares produjeran el mayor número posible de bajas en combate, fueron determinantes para la ocurrencia de lamentables hechos que enlutan sus hogares”.

De igual manera aceptaron cargos por coautoría de crímenes de lesa humanidad y de guerra el Mayor Retirado Gustavo Enrique Soto, el Coronel Retirado que comandó el Gaula Casanare entre 2006 y 2007 Wilson Camargo Tamayo, el Teniente Coronel Retirado Marcolino Puerto Jiménez, los Mayores Retirados Jorge Eduwin Gordillo y Erwin Eduardo Duarte, los Capitanes Retirados Jaime Alberto Rivera y César Augusto Cómbita, junto a otros tres Tenientes más.

De la misma forma lo hicieron los sargentos primero (r) Wilfrido Domínguez Márquez y Gildardo Antonio Jiménez Castrillón; el sargento segundo activo Faiber Alberto Amaya Ruiz; el sargento segundo (r) Wilson Salvador Burgos Jiménez; el cabo primero (r) Gélver Pérez García; el cabo segundo (r) Leandro Eliécer Moná Cano; y el civil Miguel Fernando Ramírez”, indicó en un comunicado la JEP.

Precisamente en las declaraciones de los militares retirados ante el Tribunal de Paz se explicó que cada una de las unidades actuaba de manera especial para desarrollar las operaciones ilegítimas.

El Gaula Casanare, por ejemplo, se caracterizó por presentar supuestos extorsionistas como bajas en falsos combates. Sus integrantes, además, se valieron de los engaños y del uso de reclutadores civiles para extraer a las víctimas y cometer el ilícito. Por su parte, los grupos Delta y el Grupo Guías presentaron como bajas en combate a personas señaladas como colaboradoras de la guerrilla y el Birno seleccionó entre sus víctimas a personas en situación de vulnerabilidad”, se indicaron en las declaratorias ante la JEP.

Esta lamentable etapa de terror que ocurrió en una facción de las Fuerzas Armadas suele ser indicada como responsabilidad de una política de bajas y resultados, principalmente relacionada con el expresidente Álvaro Uribe Vélez.

Al respecto el exmandatario que rigió como jefe de Estado en los años más oscuros de las ejecuciones extrajudiciales indicó el mes anterior: “Los falsos positivos parecieron una estrategia para deshonrar la Seguridad Democrática y afectar a un Gobierno que había conquistado cariño popular. Incluso el nombre daría la impresión de haber sido concebido por las mentes maliciosas de quienes debieron gozar con la tragedia que desacreditaba a nuestro gobierno y a nuestras Fuerzas Armadas”, mencionó el líder del Centro Democrático, despertando opiniones divididas a favor y en contra.

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