Andrés Fernando Medina, alias el Capi, soldado del Ejército Nacional de Colombia apartado de su cargo por posible complicidad en el atentado contra el helicóptero en el que viajaba el entonces presidente Iván Duque y contra la Brigada 30, con sede en Cúcuta, busca a toda costa ponerle freno a su extradición a Estados Unidos.
Una Corte del Distrito Sur de La Florida pidió su extradición en marzo de este año. Desde entonces, su defensa ha intentado a través de todos los recursos legales posibles, frenarla. Incluso, le pidió a la Corte Suprema de Justicia que sean practicadas varias pruebas a fin de que el militar (r) continúe su proceso en Colombia.
Los cargos por los que la corte estadounidense pide su extradición son: uso de un arma de destrucción masiva, concierto para utilizar un arma de destrucción masiva, proporcionar apoyo material a terroristas e intento y concierto de asesinato a miembros de las Fuerzas Militares.
Alias el Capi fue un reconocido piloto de helicópteros Black Hawk dentro de las Fuerzas Armadas; sin embargo, una vez salió del Ejército, trabajó en una academia de seguridad privada con sede en varias sedes del país, entre ellas Arauca, Medellín y Barranquilla.
Sin embargo, los abogados de Medina alegan que su apoderado está siendo investigado en Colombia por esos mismos delitos, motivo por el cual se le debe garantizar la prohibición de una doble incriminación. Además, el auto conocido por El Tiempo detalla que, con firma del magistrado Luis Antonio Hernández, le fue dictada una orden a la Fiscalía General de la Nación para que entregue toda la información relacionada con el proceso que el capturado tiene en Colombia.
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Concretamente, los abogados del exmilitar piden que sea tenido en cuenta el escrito de acusación y las actas de audiencias que han tenido la participación de Medina. También solicitan la inclusión del radicado que involucra al expiloto “por los mismos hechos materia de solicitud de extradición” así como los datos obtenidos por la Policía y el órgano judicial sobre las órdenes de captura vigentes y anotaciones contra Medina.
En ese sentido, el ente de control fiscal tendrá que indicar, de acuerdo con el medio citado, cuáles fueron las conductas que motivaron las investigaciones contra el acusado “y otros, bajo el consecutivo bajo el consecutivo 540016000000202200040”. También debe señalar quiénes están involucrados en esta pesquisa, sus posibles delitos y las entidades que tienen conocimiento de este proceso.
Vale indicar que, de acuerdo con las indagaciones, el Capi tuvo un papel importante en el ataque a la Brigada 30 del Ejército, pues fue él quien le dio paso a la camioneta blanca marca Toyota que estalló con aproximadamente 30 kilos de explosivos (pentrita) que estaban ocultos en la parte trasera. Ciro Alfonso Gutiérrez es otro de los investigados por, presuntamente, ser el conductor de la moto que estuvo junto a la camioneta, esperando a Medina al frente de la Brigada hasta recogerlo.
En ese orden, también se investiga si hubo fallas en el protocolo de seguridad del entonces presidente Iván Duque y tampoco se descarta la filtración de información sobre los custodios del ahora exmandatario.
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