Se conocen nuevos detalles de la historia de Nelson David, señalado asesino colombiano de personas homosexuales en España

Alexis Mesa, ciudadano cubano residente en Barcelona y una de las víctimas de Nelson David, relató lo que vivió en manos del presunto homicida

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La Ertzaintza
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En mayo de este año, autoridades españolas dieron con la captura de Nelson David, un ciudadano colombiano acusado de ser un asesino serial de personas homosexuales en ese territorio europeo. El hombre, bajo la premisa de querer colaborar con la justicia bajo voluntad propia. De esto ya han pasado cinco meses, y, en la actualidad, se siguen conociendo detalles de aquel ciudadano y de los crímenes que cometió. En su más reciente transmisión del pasado domingo 16 de octubre, el programa de investigación del canal Caracol, ‘Séptimo Día’, reveló testimonios de víctimas que aseguran haber caído en las trampas del señalado asesino.

Alexis Mesa, ciudadano cubano residente en Barcelona, es una de las víctimas de Nelson David. De acuerdo con lo que reveló a ese formato televisivo, aquel hombre lo engañó para luego robarle 14.000 euros, lo que en pesos colombianos equivaldría a más de 63 millones. Fue en la madrugada del 13 de noviembre del 2021 cuando inició su pesadilla. Él había pactado una cita con Nelson David a través de Grindr, una aplicación de citas que tiene como usuarios a personas pertenecientes a la comunidad LGBTTIQ+. Ese día, el colombiano llegó a casa de Mesa para cumplir con su respectiva cita.

Tal y como lo cuenta Alexis, compartieron un par de copas de vino y una extensa conversación. Alexis, en medio de su cita, decidió levantarse de su asiento para movilizarse a otras partes de su casa, por lo que dejó solo al colombiano con las dos bebidas sobre la mesa. Él regresó a su puesto, y siguió hablando con Nelson David. Todo empezó a tornarse peligroso cuando empezó a sentir un malestar en su cuerpo que le impedía tener fuerza o consciencia sobre sí mismo. Nelson, ante Alexis, se presentó como Carlos.

Captura de pantalla
Captura de pantalla

“Me quedé noqueado y me dormí”, contó el cubano ante los micrófonos del periodista Diego Guauque. Aquella siesta se extendió por doce horas, destacó. Se levantó con debilidad en su cuerpo, o como él mismo lo dijo, con ‘flojera’. Elln medio del malestar, se dio cuenta que le faltaban cosas en su hogar. “No me sostenía en pie. Detecto que me habían robado. La habitación estaba toda revuelta”, añadió en su charla con el programa de investigación periodística.

Alexis decidió presentarse ante las autoridades para denunciar lo ocurrido, sin embargo, según él, la respuesta de la Policía no fue contundente ni satisfactoria. Con la idea de salvaguardar la vida de otras personas que pudiesen ser víctimas del colombiano, al igual que él, buscó espacios de diálogo en medios de comunicación locales. “Lo denuncié para proteger a la comunidad gay de Barcelona. La Policía es ajena a lo que estamos expuestos como comunidad gay”, dijo.

Tras exámenes médicos para identificar lo que le había causado un profundo sueño en él, se descubrió que en el vino que tomó esa noche habían rastros de GHB, sustancia también conocida como éxtasis líquido. A esta noticia se sumó la angustia de saber que, días después de lo que le había ocurrido a él, se había reportado el caso de cuatro hombres homosexuales que habían vivido una situación similar a la suya, con el mismo colombiano, pero con un final diferentes, pues las otras cuatro personas no habían contado con la suerte de salir con vida de ello para contarlo. Esas cuatro historias se reportaron en Bilbao.


H.BILBAO/EUROPA PRESS
H.BILBAO/EUROPA PRESS

La historia del ’asesino serial de Bilbao’, como se le comenzó a decir, dio un giro tras la muerte de un ciudadano en octubre del 2021. Aunque inicialmente se habló de una muerte por causas naturales, la familia del hombre decidió pedir una segunda opinión al conocerse que las cuentas bancarias del hombre estaban teniendo una actividad que no era normal. En ese segundo análisis del hombre se encontró que había restos de GHB. La víctima fue identificada como Josu Barrero, un profesor de piano.

Luego de la muerte de Barrero, las autoridades reportaron del fallecimiento, en circunstancias similares, del concejal Koldo Martínez. También, sus cuentas bancarias empezaron a presentar retiros de altas sumas de dinero. A estos casos se sumaron otros dos, por lo que se relacionaron las muertes con el accionar del colombiano.

Un error, sin embargo, hizo que las autoridades conocieran la identidad del colombiano en diciembre del 2021. Hasta la estación de Policía llegó un hombre que aseguró haber escapado del asesino. Luego de negarse a tomar el vino que le estaba ofreciendo, contó el joven, el colombiano intentó estrangularlo. A modo de defensa, el joven logró golpearlo con un objeto de madera, además alcanzó a gritar a modo de auxilio. El colombiano, en su afán de salir de allí para no ser capturado, olvidó su maleta. En el morral se encontraba su identificación y un frasco de GHB.

Archivo
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El hombre de 25 años de edad, identificado como Nelson David, fue enviado a la cárcel el pasado sábado 7 de mayo, bajo la orden del juez encargado del caso. Según la prensa internacional, Nelson David había llegado a España hacía tres años, indocumentado. Para el momento de su captura, trabajaba en el asadero de pollos que le pertenece a la madre de su novia.

Ambas mujeres, cuyos testimonios fueron recopilados por el diario El País, aseguran que el joven ‘sería incapaz’ de cometer este tipo de delitos y que, de hecho, es ‘humilde, trabajador, bueno y callado’. Mónica, la mamá de la pareja del colombiano, contó que el joven le pidió consejos luego de empezar a ver su cara y su nombre en medios masivos de comunicación, bajo las acusaciones de ‘presunto asesino’. En ese momento, se llegó a la conclusión de que lo mejor sería asistir, voluntariamente, ante las autoridades.

La Ertzaintza registró su vivienda, ubicada en Irun, con la ayuda de perros antinarcóticos. “Exigimos medidas urgentes de protección y defensa de los derechos fundamentales (...) todos los recursos humanos y materiales necesarios para la investigación y aclaración de estos hechos”, destacó, en su momento, el Observatorio LGTBI+ del País Vasco.

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