En la mañana de este jueves 29 de septiembre, el presidente de la República, Gustavo Petro, anunció que se reabrirán las licitaciones, de manera formal, para restaurar uno de los centros hospitalarios más antiguos de Bogotá: el Hospital San Juan de Dios, ubicado en el centro capitalino.
Para lograr este cometido, según informó el jefe de Estado mediante su cuenta de Twitter, se coordinará con la administración de Claudia López, alcaldesa de Bogotá. Además, Petro contó que esta obra, que lleva varios años estancada por los últimos gobiernos y alcaldías, iniciará a ver la luz con la restauración del Materno Infantil y la casa Siberia.
Una vez se adelanten estos dos proceso, el presidente dijo que se seguirá con la remodelación de los pabellones de las áreas médicas del hospital capitalino que queda sobre la carrera décima, cerca a la estación de TransMilenio de Policarpa.
“Le informo a la ciudadanía que se han abierto los procesos de licitación para restaurar el hospital San juan de Dios de Bogotá en coordinación con la alcaldía. La nación comenzará con la restauración del Materno Infantil y la casa Siberia, continuaremos con los pabellones”, trinó el primer mandatario colombiano, Gustavo Petro.
Este anuncio iría en contravía de lo que había pedido la actual ministra de Cultura, Patricia Ariza. A algunas semanas de posesionarse, la funcionaria le solicitó al gobierno del expresidente uribista Iván Duque que no interviniera el Hospital San Juan de Dios. La solicitud iba dirigida al Ministerio de Cultura que, para ese entonces, era dirigido por Angélica Mayolo y al Consejo Nacional de Patrimonio Cultural.
“En el empalme fuimos informados de que el nuevo edificio que sustituirá al edificio central del San Juan de Dios no ha sido aún aprobado. La demolición, por disposiciones legales, está entrelazada a esta autorización”, dijo Ariza semanas atrás.
Eso sí, la coequipera del presidente Petro aseguró que el Gobierno nacional entrante iba a estar comprometido con sacar adelante el proyecto “tal como lo ordena la ley 735 de 2002, la cual declara el conjunto hospitalario como monumento nacional”.
El tema del hospital San Juan de Dios ha sido polémico durante años. De hecho, cuando Gustavo Petro fue alcalde de Bogotá adelantó gestiones para sacar adelante la remodelación de ese inmueble pero hubo demoras y finalmente no logró su adjudicación. Cuando Enrique Peñalosa volvió al Palacio Liévano en sucesión del entonces dirigente de la Bogotá Humana echó para atrás el proyecto y, desde hace años, sigue en veremos.
Hay que recordar que, incluso, el Consejo de Estado determinó este año que no tendría en cuenta la solicitud que varios concejales de Bogotá, del partido Colombia Humana (fundado por el hoy presidente de la República) habían radicado donde pedían que no se demoliera la Torre Central del Complejo Hospitalario San Juan de Dios.
“Nos permitimos solicitar a usted, en su calidad de ministra de Cultura designada, proteger el Edificio Central del Hospital San Juan de Dios, declarado Patrimonio Cultural de la Nación y que hoy se encuentra en riesgo de ser demolido por decisión de la alcaldesa de Bogotá D.C., quien otorgó a la Firma Copasa un contrato de Concesión para construir sobre el San Juan de Dios la Nueva UPME Santa Clara”, expresó en una carta, sin frutos, enviada por el concejal José Cuesta Novoa.
En su misiva al alto tribunal, el cabildante cuestionó las labores de Peñalosa que no dejaron sacar adelante las labores que Petro quería adelantar en ese hospital. “La demolición de la torre central del Hospital San Juan de Dios se sustenta en la Resolución 995 de 2016, que fue modificada presuntamente sin la debida motivación técnica y jurídica, para cambiar el nivel de protección del Edificio de dos a tres, con lo cual quedaba abierta la posibilidad de que dicho predio pudiese ser destruido, en contravía del contenido explícito de la ley 735 de 2002, que lo declaró patrimonio cultural de la Nación”, dijo meses atrás.
SEGUIR LEYENDO: