La afición de la selección Colombia comienza poco a poco a recuperar la sonrisa que el exdirector técnico Reinaldo Rueda y su estilo de juego les había quitado. La última semana de septiembre representó para el combinado nacional las primeras pruebas luego del fracaso de no haber clasificado a la Copa Mundial de Qatar 2022 y los jugadores cumplieron con su cometido.
Ante las selecciones de Guatemala y México, los cafeteros implantaron las nuevas ideas tácticas del entrenador Néstor Lorenzo y salió con dos victorias en sus bolsillos. Si bien en ciertos momentos del partido contra los Manitos el equipo volvió a entrar en sus malas prácticas, la nueva generación dio el paso al frente y sacó del bache a la plantilla en un abrir y cerrar de ojos.
Ahora, regresará el fútbol de clubes y cada uno de los jugadores que fue convocado espera reflejar un buen nivel para seguir siendo considerados por Lorenzo para el futuro. Luis Sinisterra, Yaser Asprilla, Jorge Carrascal, Andrés Llinás y John Janer Lucumí fueron los ‘nuevos’ quienes posiblemente se hayan ido de la concentración con las mejores notas, por lo que posiblemente puedan aparecer en próximas convocatorias.
Justamente esas convocatorias futuras serán fundamentales para construir al equipo definitivo que estará presente en las dos competiciones más importantes que tendrá que enfrentar el cuadro nacional en los años siguientes. En primer lugar, estarán las Eliminatorias a la Copa Mundial del 2026 Canadá/Estados Unidos/México, que estarían agendadas para que inicien en 2024.
Los amistosos internacionales que vengan para la selección en este tiempo deben ser lo suficientemente duros para preparar al nuevo equipo de cara a las eliminatorias más difíciles de todo el mundo. Sin importar que en la siguiente edición de la cita orbital, la cantidad de países que van al mundial aumentará, entregándole a la CONMEBOL un puesto directo más, la lucha por este va a ser aguerrida y no es una posibilidad para Lorenzo de que Colombia no clasifique.
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No obstante, al ver que el proceso para la clasificación al mundial se tornó un poco más accesible, el principal objetivo que viene para la escuadra nacional de aquí en adelante es la Copa América de 2024. El torneo al cual todavía no se le ha asignado sede, aunque Ecuador ya presentó la solicitud, debe ser aquel escenario donde se vea una selección consolidada y con la mayoría de errores tácticos corregidos.
En el certamen las expectativas para Colombia son altas, se espera como mínimo que igualen el tercer puesto conseguido en la Copa América de 2021, pero con selecciones como la uruguaya, brasileña y argentina constantemente creciendo, el reto será bastante complejo.
Es por esto que el cuerpo técnico de Néstor Lorenzo tendrá que comenzar a hacer las transiciones generacionales en el tiempo apropiado. Justo para que los nuevos futbolistas tengan la experiencia necesaria y no lleguen ‘biches’ a las instancias definitivas.
Lo bueno de este aspecto, es que luego de la victoria ante México por 3-2, Lorenzo es consciente de las transiciones que se deben hacer para consolidar un equipo exitoso:
“Los cambios tienen que ser pequeños pero permanentes. Creo que tenemos que ir consolidando situaciones y sociedades que uno prueba y salen bien o salen mal. Es un largo camino y hasta el último momento vamos a seguir creciendo”
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