Un nuevo round ganado obtuvo el registrador nacional Alexander Vega Rocha luego de que, en la mañana de este martes 27 de septiembre, el Consejo de Estado decidió mantenerlo en su cargo. El funcionario enfrentaba una demanda, que pedía sacarlo de la Registraduría Nacional del Estado Civil por presuntas irregularidades en su elección.
Así lo definió la Sala Quinta del tribunal, que definió que no hubo ninguna anomalía en el proceso que definió a Vega en la dirección de la entidad que regula el sistema civil del país y registra el conteo de votos en las elecciones que se desarrollan en Colombia.
Los particulares que demandaron la elección de Vega aseguraban que este no tenía la experiencia para ser registrador y que su elección habría sido viciada tanto en su forma, como en la publicidad a quien hasta hoy dirige la entidad. Hay que recordar que al actual registrador lo eligieron los presidentes de la Corte Suprema, el Consejo de Estado y la Corte Constitucional mediante un supuesto riguroso proceso de entrevistas y análisis de hojas de vida.
Dentro de los alegatos de los demandantes estaba que las entrevistas a los candidatos para dirigir la Registraduría se habían hecho de manera privada y no en audiencia pública, por lo que no se habían conocido los parámetros que los citados personajes tuvieron en cuenta para elegir al registrador.
Además, se aseguraba que el país no había conocido los elementos que, tras el análisis de los diez candidatos, había dado por ganador a Alexander Vega Rocha. Tras un exhaustivo análisis de esta demanda, que se viene presentando desde más de dos años, el Consejo de Estado determinó que el comité encargado de definir al registrador había cumplido con la ley.
“Los presidentes de la Corte Constitucional, la Corte Suprema de Justicia y Consejo de Estado, quienes adelantaron el concurso de méritos, cumplieron con los parámetros fijados en el reglamento del concurso y, además, con los términos de la Ley 1134 del 2007″, sostuvo el alto tribunal.
Además, el Consejo de Estado determinó entonces que en futuro procesos de elección del dirigente de la Registraduría se establezca un documento o registro que permita conocer las preguntas y demás parámetros para elegir ese cargo. De hecho, justificaron que el proceso de Vega se hubiese hecho privado y por eso determinaron que “no se afectaron los principios de publicidad, transparencia y participación ciudadana”, agregó la Sala Quinta.
Así mismo, el tribunal le informó al país que Vega Rocha sí cumplía con los quince años de experiencia que se exigen como requisito para alcanzar ese cargo y por eso este era apto para dirigir la institución. Esto, porque Vega tiene en su hoja de vida que trabajó en dos sitios distintos al mismo tiempo: fue jefe suplente, abogado consultor y litigante en el Grupo Jurídico Empresarial Martínez & Vega Abogados, mientras era director ejecutivo de Transparencia Electoral.
Los demandantes aseguran que estas experiencias laborales simultáneas no pueden sumar doble antigüedad dentro del concurso público, con lo cual Vega apenas tendría un total de nueve años, diez meses y cuatro días de experiencia previa a su elección como registrador. No cumplir con ese requisito constituiría una violación del numeral cuarto del artículo 232 de la Constitución Política de Colombia. Sin embargo, el Consejo de Estado desestimó este aparte.
El fallo del Consejo de Estado es el segundo espaldarazo que recibe el registrador nacional. Tiempo atrás, mediante un concepto, la Procuraduría General de la Nación también había dicho que el funcionario sí cumplía con los parámetros y demás exigencias para estar en esa designación. “Bajo los parámetros claros que fueron dispuestos tanto en el reglamento como en la convocatoria del concurso”, señaló el Ministerio Público.
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