En la mañana de este domingo 18 de septiembre, en un avión Boing 737 de la Fuerza Aérea Colombiana, el presidente Gustavo Petro, con algunos integrantes de su gabinete, y salió rumbo a los Estados Unidos para atender con los compromisos que tiene allí, especialmente, su intervención en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y su primer encuentro con su homólogo norteamericano, Joe Biden. Tal y como se conoció desde el portal informativo de la presidencia, el jefe de Estado tiene a su lado, entre otros funcionarios, a el canciller Álvaro Leyva; Susana Muhamad, ministra de Ambiente, la jefe de Gabinete, Laura Sarabia; Alejandro Gaviria, ministro de Educación; la viceministra de Asuntos Multilaterales, Laura Gil.
“Hará su primera intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas como mandatario de los colombianos; planteará la necesidad y urgencia de acciones frente a la amenaza de la crisis climática (...) Se reunirá con la comunidad colombiana en el sector neoyorquino de Queens, y asistirá a la reunión previa a la COP15, donde se discutirán temas ambientales y de biodiversidad”, se lee en el hilo de trinos en los que se expusieron las razones del viaje del líder del Pacto Histórico.
“En Nueva York, el presidente Gustavo Petro cumplirá una intensa agenda diplomática, se reunirá con el Secretario General de la ONU, António Guterres, y otros líderes mundiales”, se agrega. El presidente se reunirá con empresarios y con comunidades colombianas residentes en los Estados Unidos. A su llegada se espera su reunión con Guterres, mientras que para el miércoles se espera su intervención ante Naciones Unidas, allí hablará de la crisis energética y climática y del conflicto armado que se vive entre Rusia y Ucrania.
Para el miércoles 21 de septiembre, por el otro lado, se tiene agendada la reunión con su colega, el presidente estadounidense, Joe Biden. Justamente, antes de salir de territorio nacional, dejó firmado un decreto en el que dejó como presidente encargada a la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
Es de recordar que fue el pasado 21 de junio, dos días después de ganar la Presidencia de la República, Gustavo Petro recibió una llamada de Joe Biden. El presidente de los Estados Unidos lo felicitó por su triunfo. Para aquellos días, el líder del Pacto Histórico calificó de ‘amistosa’ la conversación y aseguró que dialogaron sobre la importancia de una relación más igualitaria entre ambos países.
“En el camino de una más intensa y normal relación diplomática he sostenido ahora una conversación muy amistosa con el presidente Biden de los EE. UU. En sus palabras una relación “más igualitaria” en provecho de los dos pueblos”, expresó Petro.
La Casa Blanca, por su parte, aseguró que el Gobierno de Estados Unidos “espera trabajar junto con el presidente electo para continuar reforzando la cooperación bilateral en los ámbitos de cambio climático, seguridad sanitaria y la implementación de los Acuerdos de Paz de 2016″, se aseguró desde Washington después de la victoria del candidato progresista.
A principios de este mes, en una entrevista con la agencia de noticias EFE un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. “Estamos deseando trabajar de manera constructiva y respetuosa con el presidente Petro de Colombia en una gran variedad de asuntos de interés mutuo, incluida una solución pacífica en Venezuela”, afirmó el portavoz.
El portavoz estadounidense reiteró que, independientemente de las acciones de Colombia, el Gobierno de Joe Biden sigue reconociendo al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela.
Desde la posesión de Petro, y desde la llamada de ambos, dijo el vocero, ambos países han mantenido conversaciones “activas” y “con regularidad” a “todos los niveles del Gobierno” desde que Petro ganara las elecciones.
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