Las autoridades lograron desarticular un grupo de extorsionistas de la banda Los Pachelly, un brazo armado del Clan del Golfo, que se dedicaba a cobrar millonarias extorsiones a comerciantes y ganaderos del norte de Antioquia, a quienes les exigían hasta 15 millones de pesos para no atentar contra su vida y sus propiedades.
Los capturados fueron identificados bajos los alias de ‘Energía’, ‘el Veneco’, ‘Albeiro’, ‘Héctor’, ’El Toca’ y ‘Juanfer’, quienes trabajaban en conjunto con alias ‘La Chinga’, quien estaría delinquiendo desde la cárcel donde se encuentra recluido y fue notificado en prisión de la nueva acusación.
La captura la efectuó el Gaula Militar y el Ejército en Antioquia, luego de seguimientos a la estructura criminal que les permitió identificar a los integrantes, así como la forma en la que operaban. De acuerdo con las autoridades, los capturados se ocultaban tras fachadas como supuestos carniceros, mototaxistas y conductores de volquetas, para extorsionar a los comerciantes.
Los extorsionistas perfilaban a las víctimas para establecer las sumas de dinero que les exigirían de acuerdo a su labor o ganancias comerciales, que llegaban a millonarias sumas de dinero para cualquier transacción comercial o incluso para abrir sus negocios en tranquilidad.
“Cobraban mensualmente la sumas entre $500.000 y $1.000.000 millón a comerciantes y semestralmente la suma de 50 millones de pesos a ganaderos y empresarios de la zona. Aparentemente este grupo multi crimen estaba al servicio del Clan del Golfo”, señaló el mayor Juan José Gutiérrez, comandante del Gaula Militar Antioquia.
Las extorsiones a los comerciantes llegaban hasta los 15 millones de pesos para que pudieran abrir sus negocios y trabajar, de lo contrario tendrían problemas con la banda criminal. Así mismo, a quienes ponían en venta lotes o inmuebles, los extorsionistas les establecían cuotas de hasta 100 millones de pesos. Los conductores y constructores también eran víctimas de intimidaciones.
La banda Los Pachelly sería una estructura vinculada al Clan del Golfo, que además de los municipios de Bello y San Pedro, habría extendido su actuar también a Belmira y Entrerríos, expandiendo su presencia en el norte de Antioquia. Además, también serían responsables de homicidios selectivos, narcotráfico y desplazamientos forzados en esa zona del país.
Esta organización criminal nació en el barrio del mismo nombre de Bello, por amigos y familiares que se aliaron para conformar la banda. Con el tiempo, ha ampliado su accionar hasta extenderse al norte del departamento y, según Juan Diego Restrepo, director de Verdad Abierta citado en Blu Radio, ha tenido un fuerte poder en la organización social de jóvenes de esa zona de Antioquia.
Denominados como grupo armado urbano, manifiestan tener presencia en toda el área urbana de Medellín. Así lo dejaron claro en un comunicado del pasado 28 de agosto, compartido por el senador Iván Cepeda, en el que expresaron su voluntad de acogerse a los llamados de paz total que ha extendido el gobierno Nacional para la consolidación de acuerdos con los grupos delincuenciales y armados.
En el comunicado proponían al Movimiento Social por la Reconciliación y la Convivencia Sinergia como la organización de la sociedad civil que adelantara los acercamientos con los miembros de la organización criminal, para establecer la agenda de diálogo y los puntos de interés.
Uno de los voceros de ese movimiento es el abogado Álex Morales, quien la semana pasada recibió amenazas de muerte. Según Henry Alberto Holguín, coordinador general de Sinergia, el defensor de derechos humanos recibió en su residencia una corona fúnebre con un mensaje intimidante que también se extendía a su familia y amigos.
Aunque estas situaciones se vienen presentando desde 2016, el movimiento manifiesta que puede estar relacionado con las denuncias que realizaron de falsos positivos judiciales en el Valle de Aburrá que permitió iniciar procesos investigativos contra miembros de la Fiscalía.
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