Durante los últimos días, se han registrado fuertes lluvias en la ciudad de Barranquilla, situación que, como ocurre de manera frecuente en temporada invernal, genera la creación de arroyos por algunas vías de la capital del Atlántico. Precisamente, en la tarde del jueves se registró esta situación en el barrio San Nicolás.
Sobre la vía donde se registró una creciente por cuenta de las intensas lluvias, transitaba una ruta escolar que pretendía transportar a los niños estudiantes de regreso a sus casas. Pese al fuerte caudal que tomó el cuerpo de agua, el conductor de la ruta decidió tomar esta calle e intentar superar la fuerza del agua. Sin embargo, sobre la mitad de esta calle, el vehículo quedó frenado, sin poder avanzar.
A través de varios videos publicados por las redes sociales, se logra ver cómo el agua que, corría con fuerza, puso en peligro la integridad de los menores, toda vez que quedaron atrapados al interior de la ruta escolar, sin oportunidad alguna de salir del vehículo.
“Un carro escolar venía transitando por aquí e iba a cruzar el arroyo, pero el arroyo ya estaba crecido, estaba lloviendo, cuando él (el conductor) va a subir el arroyo, el carro se le apaga, cuando el carro se le apaga, el arroyo coge fuerza y se lo lleva hasta un tronco atravesado que lo logró parar”, expresó un habitante del sector al medio local CTV Barranquilla.
Frente a la situación, la comunidad que presenció el hecho intentó socorrer a los menores, situándose en lugares cercanos al vehículo y a una altura de un piso, para estar lo más lejos posible de las aguas. Sin embargo, los esfuerzos de las personas no rindieron mayor éxito, pues en ese momento no se logró quitar a los niños del peligro del que estaban expuestos.
De acuerdo con las observaciones expuestas por habitantes de la zona, los niños estaban llorando de los nervios.
“Los niños tienen edades entre los 10 y 11 años, eran de grado séptimo. Los niños estaban llorando, otros estaban riéndose, pero yo creo que de los nervios”, añadió el ciudadano al medio citado.
Por esta razón, se pidió el auxilio a las autoridades para que acudieran al sector y poner a salvo a los menores. Al interior del vehículo, se encontraban 11 niños, el conductor y la monitora, quien se encarga de cuidar a los menores en sus traslados al interior de la ruta escolar.
Minutos más tarde y, aún bajo el fuerte aguacero que cayó sobre la ciudad, llegó un camión del cuerpo de Bomberos de la ciudad para asistir a los menores. El automotor que atendió el llamado de emergencia se ubicó muy cerca a la ruta y uno a uno fue recibiendo a los 11 niños que eran sacados de la ruta en brazos de la mujer que sería la monitora de esta ruta escolar.
Finalmente, los niños y los otros dos adultos que se encontraban en el automotor se pusieron a salvo de las aguas.
Luego de poner a salvo a los menores, el camión del cuerpo de Bomberos puedo remover al automotor que quedó varado en medio de las aguas hasta un lugar seguro. Según explicó el ciudadano que presenció los hechos, esta situación se pudo haber evitado, toda vez que, considera el ciudadano, esta maniobra terminó de esta manera por la aparente imprudencia del conductor de la ruta escolar.
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