Por casi una década el colegio Agustín Nieto Caballero tuvo que soportar a las estructuras criminales que delinquían por la proliferación de los expendios de drogas contiguos del Bronx y de Cinco Huecos, quienes incluso llegaron a instrumentalizar a los menores que estudiaban allí para volverlos adictos y convertirlos en sus distribuidores de sustancias ilegales, cinco años después estarían volviendo a ser víctimas ahora por cuenta del Tren Aragua, la organización delictiva con origen en Venezuela que busca quedarse con las rentas ilegales que hay en Bogotá.
La institución educativa de 46 años, que está ubicada en la calle 11 con carrera 19, en el costado noroccidental de la Plaza España, está sufriendo nuevamente por la deserción de sus estudiantes ya que sus padres los están retirando ante las amenazas que están padeciendo por parte de ese grupo criminal que los está extorsionando según denunció el concejal Javier Ospina en la emisora RCN Radio.
“Los señores del Tren de Aragua, que gobiernan en esta ciudad, en cabeza de alias Niño Guerrero, los amenazaron. Les dijeron que si no desocupaban el paga diario y no se iban de la localidad de Los Mártires, los iban a asesinar a ellos y a sus hijos; eso no puede seguir pasando y mucho menos amenazado la vida de menores de edad”, indicó el cabildante.
El propio rector del colegio, Jairo Orlando Rodríguez, confirmó el informativo de televisión Citynoticias, del canal local de Bogotá City T.V., que de nuevo están siendo víctimas de la criminalidad.
“No es justo que el nivel de inseguridad afecte a nuestros niños, niñas y jóvenes, y nos los estén retirando, afectando así el derecho a la educación”, afirmó.
En ese noticiero consultaron con algunos de los padres de familia, quienes señalaron que les preocupa lo que está ocurriendo en los alrededores de la institución educativa.
“Siempre salgo con la inseguridad con el miedo, el temor porque ya he escuchado por muchos sitios que roban niños, he escuchado de las vacunas (extorsiones) para los transmilenios y por acá se observa mucho que roban”, contó en Citynoticias una de las madres que tiene a sus hijos estudiando en ese colegio.
Aseguraron también en ese noticiero que los delincuentes se agrupan en las inmediaciones de la Estación de la Sabana de Transmilenio para cobrar extorsiones y dejarlos utilizar el transporte público.
“Ahí se hacen y cobran como vacuna para que uno pueda pasar a la registradora”, sostuvo otra de las madres de familia.
En Citynoticias consultaron con Beltrán Rafael Báez, experto en seguridad de la Universidad Manuela Beltrán, quien reiteró que con estas acciones los criminales buscan quedarse con las rentas criminales.
“Las amenazas que establece esta banda delincuencial básicamente son establecidos para el control territorial de esta zona permitiendo favorecer el flujo del microtráfico, así como el control posicional en materia de seguridad y logística”, explicó.
Ante la situación, en la Alcaldía Mayor de Bogotá informaron que una vez conocieron de esa situación iniciaron el acompañamiento de los afectados, aunque aclaró que la situación no era como la estaba denunciando el cabildante Javier Ospina.
“Inmediatamente, ese mismo día se desplegó nuestro equipo de reacción de gestores de convivencia, el equipo que estamos coordinando además con la estrategia de confianza de la Secretaría de Educación, hablamos con la familia, hablamos con los directivos del colegio, tenemos mucha más información; no es exactamente como lo planteaba en su denuncia el concejal”, indicó en RCN Radio el secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto.
El funcionario también anunció que las mismas acciones de refuerzo de seguridad que se realizarán en ese colegio, también lo harán en las 400 instituciones educativas del Distrito.
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