Una nueva masacre ocurrió en Colombia en horas recientes. Fue en Landázuri, pueblo de Santander, que cinco personas asesinaron a una familia residente de la vereda Buenos Aires. Los señalados homicidas, de nacionalidad venezolana, terminaron con la vida profesor Álvaro Díaz Pineda; su esposa, Loiden Acuña Pérez, y sus hijos, Sebastián y Karen. Natalia Calle, la única sobreviviente de lo ocurrido, relató lo que vivió en aquellos minutos de terror. Fue ella quien avisó a la comunidad de lo ocurrido, y fue tras ese anuncio que los vecinos decidieron tomar justicia por mano propia. Los responsables de la muerte violenta de la familia fueron linchados.
La mujer, de acuerdo con lo que ha reportado la autoridad y la prensa nacional, trabajaba con la familia, y logro huir de la escena de la crimen. Según contó la sobreviviente, de lejos, alcanzó a escuchar la conversación que mantuvieron los homicidas con el profesor, quien, en su desespero, intentó negociar para que no le hicieran nada, ni a él ni a su familia. “No me vayan a matar, si yo lo que les hice fue un favor con esa plata, no sean tan (...) La niña de 13 años se abalanzó para proteger al papá y los hombres la atacaron con arma blanca, lo mismo pasó con el otro hijo”, relató la mujer a investigadores que hablaron con el diario El Tiempo.
De acuerdo con lo que comentó, logró salir del lugar de los hechos cuando uno de los criminales, que la había pretendido previamente, le dijo que prefería que ella muriera quemada, para que sufriera, por no haber querido tener una relación con él. Aunque el establecimiento se prendió en llamas, ella logró salir de la casa. La familia ya había sido asesinada.
“El profesor no era de peleas, era una persona muy alegre (…) Les había prestado plata, les daba mercado, les había fiado, en fin. Como eran empleados, él les suministraba mercado. Ellos ya tenían previsto robarlo e irse de la zona”, indicó el alcalde en Mañanas Blu.
Es de resaltar que, de acuerdo con el expediente, el homicidio múltiple ocurrió sobre las 3:00 de la madrugada del domingo 11 de septiembre. “Ocurrió a las 3:00 de la madrugada de este domingo en el corregimiento Plan de Armas, sector Miralindo, donde fueron asesinados cuatro integrantes de una misma familia. Uno de ellos, el señor Álvaro Díaz, quien era docente, su esposa y dos hijos, un joven de 20 años y una niña de 13 años”, explicó, para el momento de los hechos, John Jaime Ruiz, secretario del Interior de Santander.
Como consecuencia de los hechos, autoridades de Santander decidieron declarar tres días de duelo. “Ley seca y toque de queda. Prohibida en toda la jurisdicción de Landázuri la venta y consumo de bebidas embriagantes de domingo a lunes, de 6:00 p. m. a 7:00 a. m., del día siguiente. La Policía ejercerá todas las funciones de control”, dijo el alcalde municipal, Marlon Ballén.
Paralelo al anuncio, el lunes 12 de septiembre se expidió el decreto 059, “por medio del cual se rinden honores póstumos y se decretan tres días de luto municipal por los sensibles fallecimientos de los integrantes del núcleo familiar Díaz Acuña y se ordena izar la bandera municipal a media asta”.
En la mañana de este 13 de septiembre se informó que el señalado delincuente que logró salvarse de la venganza de la comunidad fue capturado. “Gracias al apoyo oportuno de la comunidad, fue entregado a la fuerza pública William Trejos, uno de los presuntos responsables del múltiple homicidio ocurrido este domingo en Landázuri”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
Este mismo martes, desde la W Radio, se reportó que la Fiscalía está en proceso de esclarecer lo sucedido con la comunidad. Resaltaron que la justicia a mano propia no debería ser una opción. “La ciudadanía no nos deja judicializar y capturar a los delincuentes, y los jueces declaran ilegales este tipo de detenciones y dejan libres a los investigados”, comentó el ente acusador a esa emisora.
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