El 30 de noviembre de 2021, fue encontrado el cuerpo del profesor de baile Gamaliel Álvarez, enterrado en las paredes de su propia casa. La historia que parecía salida de un cuento de terror se dio en Cajicá, es un pequeño municipio ubicado a una hora de Bogotá, un lugar conocido por ser una parada obligatoria durante el famoso recorrido del tren de la sabana.
Tras pasados 10 meses desde el suceso que aterró a los vecinos del joven profesor y sus seres queridos, han salido nuevos hallazgos de la investigación que tiene como presunto responsable de los hechos al maestro de obra, Orlando Rojas, que antes de la terrible muerte de Álvarez se encontraba trabajando en unos arreglos de la casa de la víctima.
Recordemos que la información preliminar de la investigación se señaló que tras hacer el levantamiento del cuerpo se determinó que el cadáver presentaba una herida con arma blanca en el cuello y signos de maltrato. Las autoridades procedieron a inspeccionar el lugar, luego de que los vecinos denunciaron ante la Policía que había olores extraños provenientes del hogar del joven docente.
Ahora que el presunto asesino de Gamaliel, será acusado por varios delitos, entre ellos por homicidio agravado el próximo 27 de septiembre, El Tiempo, dio a conocer la hipótesis que manejarán las autoridades en el juicio alrededor de lo que pasó.
Lo primero para entender este caso, es hacer énfasis en que, al parecer, el agresor del profesor de baile planeó todo desde el comienzo, por lo que se encargó de ganar una confianza con su trabajo y largas charlas en las que le contó varias cosas de su vida.
Tras crear lo que parecía ser una amistad, el sujeto aprovechó y perpetro su crimen. Primero golpeo a Gamaliel Álvarez en la cabeza, y luego en su costilla derecha. Todo esto para poder debilitarlo e impedir que el profesor pudiera defenderse.
Posterior a debilitar a Álvarez, Rojas lo mató con sevicia, procedió a degollarlo con un arma cortopunzante, herida que finalmente acabo con la vida del profesor de baile. Luego, para ocultar sus huellas, pensó en quemarlo, de esta forma regó gasolina sobre el cuerpo y prendió fuego. Sin embargo, apagó el cuerpo al darse cuenta de que podría ser una gran alarma para los habitantes de la zona. De esta forma, finalmente, aprovechó su trabajo en la construcción y procedió a hacer una bóveda, donde finalmente escondió el cuerpo.
Para reforzar su hipótesis, los investigadores tiene fotos donde se ve un baño que parece haber sido quemado, además, de imágenes donde se ve el cajón de cemento que creo que maestro de obra para ocultar el cuerpo de su víctima.
Además, otra de las pruebas que tendrían los fiscales del caso es que Rojas se habría quedado con algunas pertenencias de Gamaliel Álvarez como su tarjeta bancaria, su celular y su moto, la cual vendió en nueve millones de pesos falsificando la firma, de acuerdo a lo señalado por el medio colombiano.
Por otro lado, testimonios de los vecinos del profesor señalaron que una vez desapareció, el obrero continuaba entrando y saliendo de la propiedad y aseguraba que Álvarez se habría ido de viaje por un tiempo, sumado, aunque el bailarín no habría dicho nada a las personas más cercanas a él mediante mensajes le pedía, supuestamente, a algunos de sus amigos y familiares que le consignaran dinero.
Finalmente, tras sospechas de sus amigos y el olor putrefacto de la vivienda, los vecinos denunciaron la desaparición y el extraño olor y así fue como tras dos meses de no ver a Álvarez, el cuerpo fue encontrado al interior de la vivienda escondido, con signos de maltrato y descomposición.
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