En la madrugada de este domingo fue asesinado el patrullero de la Policía Francisco Javier Ramos Aljure, tras ser atacado a balazos a las afueras de un establecimiento nocturno, adonde había asistido para disfrutar de su descanso junto a familiares y amigos.
Ramos Aljure se encontraba adscrito a la Estación de Policía de Colosó, en el departamento de Sucre, de donde era oriundo. Estuvo en sus labores de vigilancia durante todo el sábado hasta las 8:00 de la noche, cuando terminó su jornada y salió a descanso.
Al parecer, el uniformado se encontró con unos amigos para pasar la noche en un estadero que se encontraba de inauguración. Allí estuvo hasta las 2:40 de la madrugada de este domingo 11 de septiembre cuando fue asesinado por hombres no identificado que le dispararon a la cabeza.
Las autoridades indicaron que sobre esa hora se presentó una riña entre dos personas al interior del establecimiento, que se trasladó a la calle. El uniformado, en medio del altercado, intentó mediar la situación para calmar los ánimos y salió a la calle detrás de los involucrados, señaló el diario El Universal.
Cuando Ramos Aljure salió a la calle, un hombre le disparó en varias ocasiones y huyó del lugar. El patrullero fue auxiliado por las personas que se encontraban en el lugar y sus cercanos, quienes lo trasladaron a la Clínica Salud Social de Sincelejo, pero falleció poco después.
El comandante de la Policía en Sucre, coronel Néstor Pineda Castellanos, anunció la apertura de una investigación disciplinaria y la respectiva denuncia penal con el objetivo de aclarar todos los detalles de tiempo, modo y lugar en el que se produjo el homicidio.
Así mismo, las autoridades han solicitado información ciudadana para poder identificar a los autores del hecho violento que segó la vida del patrullero Ramos y confirmar las versiones que se han planteado al respecto, en medio de las hipótesis que maneja la investigación.
Medio locales como La Línea, también replicadas por Blu Radio, sostienen que presuntamente la riña que motivó la salida del patrullero Ramos a la calle podría haber sido una puesta en escena de personas que actuaron en complicidad con los asesinos, la cual tenía la intención de hacer salir al uniformado del establecimiento, ponerlo en indefensión y preparar el escenario para el homicidio.
Ramos Aljure llevaba seis años en la institución. Sería la víctima número 74 de homicidios contra uniformados de la Policía en lo corrido del año y el segundo en Montes de María. Los policías han sido asesinados en al menos 64 ataques, 42 de ellos cuando se encontraban en cumplimiento del servicio y 28 fuera de sus labores. Además, 31 han resultado lesionados en esas arremetidas violentas.
Segundo homicidio contra la Policía durante el fin de semana
Este 10 de septiembre también se registró otro homicidio contra un uniformado. El hecho se presentó en el municipio de Roldanillo, norte del Valle del Cauca, donde fue ultimado el intendente Fernando Rodríguez cuando se encontraba de servicio.
El funcionario adelantaba labores de registro y control. Sobre la 1:00 de la tarde requirió a unas personas que se movilizaban en motocicletas, pero cuando iba a realizar la requisa, lo atacaron con un arma de fuego y lo hirieron de muerte.
Los uniformados reaccionaron al ataque y lograron impactar a uno de los atacantes, quien resultó muerto también en el lugar de los hechos y portaba, según indicó coronel Wilson Román Silva, subcomandante de Policía del Valle del Cauca, portaba un revólver.
Según ha explicado el ministro, la mayoría de los ataques contra la fuerza pública son atribuidos al plan pistola del Clan del Golfo en la primera parte del año, pero después del mes de agosto la información de inteligencia señala que serían otras organizaciones armadas como las disidencias de las Farc las responsables de la violenta arremetida.
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