Defensoría del Pueblo emite nueva alerta temprana y advierte que la guerra no para en el nordeste de Antioquia

Desde 2016, la entidad señala la presencia de por lo menos cinco estructuras armadas ilegales en los municipios Vegachí, Remedios, Segovia, Amalfi y Anorí, donde ha habido también un aumento en casos de homicidio

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Pese al compromiso que ha sostenido el Gobierno nacional con la búsqueda e implementación de la ‘Paz total’ en el país, la violencia no cesa en algunas regiones, como Antioquia, donde predominan estructuras como el Clan del Golfo y las disidencias de las extintas Farc.

En el nordeste, concretamente en los municipios Vegachí, Remedios, Segovia, Amalfi y Anorí hay por lo menos cinco grupos armados disputándose el control de estos territorios. Así lo denunció la Defensoría del Pueblo a través de una nueva alerta temprana emitida el miércoles 7 de septiembre, en la cual también hacen un llamado sobre las graves violaciones a los derechos humanos presentadas en esta zona del departamento.

De hecho, desde 2016 esta entidad ha señalado el escalamiento de violencia en estos territorios que, antes de la firma del Acuerdo Final de Paz, eran controladas por las Farc-EP. Ahora, es ‘tierra de nadie’, pues desde entonces ha sido zona en constante disputa.

Al respecto, señalaron que en el nordeste antioqueño “existe un alto riesgo de violaciones a los derechos humanos contra líderes y lideresas sociales, firmantes del Acuerdo de Paz y sus familias y defensores de derechos humanos”. Sumado a eso, la Defensoría encontró que los homicidios en esta región, así como el reclutamiento forzado de niñas, niños y adolescentes y enfrentamientos en los que la población queda en medio de las ráfagas.

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La entidad también muestra con preocupación que los gobiernos anteriores fueron ineficaces para contrarrestar la expansión de grupos armados tras la firma de los acuerdos pactados en La Habana y el vacío territorial que dejaron las extintas Farc. También resaltan que en 2020 se presentó la alarmante cifra de 139 homicidios en los cinco municipios mencionados en la alerta temprana. Dicho número aumentó a 147 en 2021.

Además, con corte de mayo de este año, actores armados han matado a 81 personas; incluso, detallan que solo en Segovia se han registrado más de 500 casos de desplazamiento forzado en los dos últimos años. Al respecto, vale indicar que el Ejército de Liberación Nacional —ELN— aprovechó el proceso de dejación de armas de los exFarc para intentar tener el control territorial de la zona; empero, el frente 36 de las disidencias se resisten a no tener control de estos municipios.

La Defensoría, en cabeza de Carlos Camargo, apuntan también que “Las AGC —Clan del golfo—, han fortalecido su presencia en el nordeste de Antioquia mediante el Bloque Roberto Vargas Gutiérrez con influencia desde el Bajo Cauca, y el Frente Jorge Iván Arboleda Garcés con influencia desde el Magdalena Medio y con presencia en el nordeste, desde Yalí hasta Segovia” y le hizo un llamado al gobierno del presidente Gustavo Petro para que frene la avanzada de estas estructuras ilegales.

Concretamente, el llamado fue dirigido al Ministerio de Defensa y su cabeza, Iván Velásquez, así como a los efectivos de la fuerza pública para que “se abstengan de justificar sus acciones en la existencia de la alerta”. Camargo le recomendó a la Policía de Antioquia y a la VII División del Ejército Nacional adelantar el desmantelamiento del Bloque Virgilio Peralta Arenas y el Clan del Golfo.

La Unidad Nacional de Protección también fue mencionada en este llamamiento, afirmando que sobre ellos recae la obligación de defender la vida de líderes y lideresas sociales.

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