No cesa la polémica entre el Gobierno nacional dirigido por el presidente Gustavo Petro y el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), quienes han confrontado en las últimas semanas por cuenta de la invasión de predios en el país. Recientemente, le anunciaron al mandatario que no desocuparán los terrenos privados que estarían invadiendo.
La decisión la tomaron mediante una fuerte misiva que hicieron pública, donde no solo se evidencia que violaron las 48 horas que el Gobierno les dio para abandonar las tierras, sino que aseguraron que buscarán nuevos predios para tomar posesión de ellos, bajo el argumento de que están retomando lo que les pertenece.
A Petro lo llaman como “el gran jefe” y, a especie de reto, aseguran que una vez se cumplieron las 48 horas que les fijaron se refieren a toda la población para contarles quiénes son y por qué seguirán en esos terrenos. La carta lleva de título No nos vamos: esta es nuestra casa para vivir y luchar II.
En el texto, recordaron que hace casi 20 años que están luchando por los terrenos que les habría arrebatado mediante las vías de hecho. “Una lucha que tiene raíces en 1538, cuando nuestro pueblo decide declararle la guerra a los invasores”, señala el CRIC y aseguran que los citados sujetos los mandaron para el monte.
“Hoy tienen en su poder las tierras más fértiles y tienen documentos que prueban que son propietarios y son un poder organizado que mueve los hilos de la política y la economía y la justicia y los medios de comunicación en Colombia”, aseveran.
Además, aseguran que los invasores les causó perder una de sus principales doctrinas: la importancia del medio ambiente. “El invasor nos adoctrinó para enseñarnos que el páramo es un recurso que produce dinero, que al talar la selva podemos aumentar las cuentas bancarias, que al escarbar la entraña de Uma Kiwe con grandes tubos podemos acceder a una vida de bienestar. Esa es la palabra del invasor y la llama el objetivo, el plan de vida”, señalaron.
Así mismo, cuestionan de cómo los anteriores gobiernos los han querido sacar de los terrenos privados en Cauca, a quienes culpan de “dañarle el rostro a la Madre Tierra” causando, a su juicio, múltiples afectaciones a los ecosistemas de todo el territorio nacional.
“En otras regiones de Colombia el invasor desplazó con la guerra a las comunidades y sembró palma en miles y miles de hectáreas y en otras regiones han desplazado comunidades para construir represas o para sacar oro o para sacar petróleo”, dicen, a su vez que recuerdan otros de los motivos que los han llevado a protestar contra los gobiernos de turno, como esta vez el que dirigen Gustavo Petro y Francia Márquez.
“Llegan los medios de comunicación de la agroindustria o del poder en Colombia y nos tildan de terroristas, perezosos, que frenamos el desarrollo, y nos dicen que somos invasores, como lo dice el actual gobierno de Petro y Francia”, asegura la guardia indígena, señalando de expropiador a la empresa azucarera Incauca.
Antes de termina su misiva, aseguran que el gobierno Petro los quiso sacar a la fuerza de esas tierras con la presencia del Ejército y el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad). “No hubo media hora de diálogo, como había prometido el nuevo gobierno, la tanqueta entró disparando gases”, denunciaron, a su vez que le dejaron una durísima advertencia al presidente Petro.
“Le mandamos a decir al gran jefe que NO vamos a desalojar, que aquí en estas tierras nos quedamos porque esta es nuestra casa para vivir y luchar”, dijeron.
Además, dijeron que en el pasado los paramilitares le dieron más tiempo para abandonar esos predios y por eso ahora invadirán nuevos terrenos “porque nuestra lucha no se detiene”, agregaron, mientras que invitaron a otros indígenas a no obedecer la orden del Gobierno. La carta completa aquí.
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