Turistas y habitantes del municipio de Bahía Solano avistaron la emergencia que sufrió un ballenato en las costas del Pacífico colombiano, cuando quedó atrapado en una red de pesca abandonada que se enredó en una de sus aletas y le impedía moverse con destreza.
En videos difundidos por los habitantes, se veía al cetáceo sobresalir a la superficie con sus aletas, en el mismo punto, sin poder desplazarse rápidamente en el agua, por lo que se pudo concluir que estaba pasando por una emergencia y necesitaba ayuda.
La alerta fue recibida por numerosas organizaciones como la Armada de Colombia, la Dirección General Marítima, el Centro de Buceo Ankla Azul, la Fundación Macuáticos Colombia y Parques Nacionales Naturales de Colombia, que acudieron al rescate del animal en aguas del pacífico.
A la Estación de Guardacostas de la Armada llegó la alerta por funcionarios del Parque Nacional Natural Utría, quienes informaron que un ballenato tenía una aleta enredada en un trasmallo por lo que no podía desplazarse en el agua con normalidad.
Ante la situación, se desplegó a la Unidad de Reacción Rápida de la Estación de Guardacostas de Bahía Solano, que se encontraba cerca en labores de patrullaje y control marítimo, quienes llegaron al punto para colaborar en el rescate y así mismo realizar control para impedir que otras embarcaciones que pudieran afectar al ballenato se acercaran.
Los guardacostas de la Armada trasladaron a dos buzos de la compañía Ankla quienes se sumergieron en el mar para tratar de liberar al animal. Verificaron el origen de la emergencia y procedieron a retirar la red de la aleta. “Estaba nadando bastante restringida la movilidad y lento”, señaló el capitán de Fragata Wílber Roa, Comandante de Guardacostas del Pacífico.
Los buzos nadaron junto con la ballena y trataban de quitarle la red, cuando ya llevaban una gran parte de la malla cortada, el animal se sintió libre y se sumergió. Los rescatistas lo perdieron de vista y no lo pudieron seguir para verificar su situación, tras más de siete horas de trabajo.
El capitán Roa explicó a Infobae que el trasmallo se encontraba abandonado y por el material se deduce que no pertenecía a un buque de pesca industrial. “Todo indicaría que fuera una pesca artesanal y lo dejaron abandonado”, una actividad que sí está permitida, sin embargo, de manera irresponsable se dejó ese residuo en el agua que afecta a la fauna marina.
La red que afectó al cetáceo tenía alrededor de dos metros de largo y, según Codechoco, era una malla multifilamento número 8 de color verde. Son unas herramientas de pesca que no están ancladas al piso, sino que flotan, y así habría terminado en la aleta del ballenato que llegó a la costas del Pacífico colombiano.
Aunque la organización señaló que ese tipo de mallas no son comunes en esa zona del Pacífico, el capitán Roa señaló a este medio que las redes de pesca son comunes e incluso se ven abandonadas en las bahías o en las aguas, lo que sería una actividad irresponsable por parte de los pescadores.
“La Armada de Colombia continuará disponiendo del talento humano, así como de sus capacidades para proteger la vida en el mar en cualquiera de sus formas. Así mismo, invita a la comunidad a preservar la flora y fauna del medio marino, evitando dejar residuos sólidos que puedan afectar la seguridad de las especies marinas, al tiempo que ratifica su compromiso con la defensa del medio ambiente, en las áreas bajo su responsabilidad”, señaló la institución.
Ese es uno de los principales atractivos turísticos naturales de esa zona del país, que se puede disfrutar durante esta temporada del año, que se extiende hasta mediados de octubre.
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