Carlos Mattos habría presionado a reclusos de la cárcel de Cómbita para obtener favores sexuales

El empresario está condenado a nueve años de cárcel por el Juzgado 30 Penal del Circuito de Bogotá y a otros siete años por el Juzgado 11 Penal del Circuito de Bogotá, para un total de 16 años

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El pasado lunes 29 de agosto se conoció que Carlos Mattos fue trasladado a la cárcel de Barranquilla. De acuerdo con el INPEC, se autorizó el traslado por alegatos de la defensa del empresario sobre la delicada situación de salud que afronta Mattos en el piso térmico boyacense.
El pasado lunes 29 de agosto se conoció que Carlos Mattos fue trasladado a la cárcel de Barranquilla. De acuerdo con el INPEC, se autorizó el traslado por alegatos de la defensa del empresario sobre la delicada situación de salud que afronta Mattos en el piso térmico boyacense.

El empresario Carlos Mattos, condenado por un juez de Bogotá el pasado 7 de junio al encontrarlo responsable del delito de cohecho tras ofrecerle dinero a funcionarios públicos, en esta caso a una juez, volvió a ser noticia, esta vez por una denuncia de abuso sexual.

Este 1 de septiembre La Nueva Prensa reveló que Carlos Mattos habría presionado a varios de los reclusos de la cárcel de Cómbita para sus pretensiones sexuales, bajo la amenaza de traslado que lograría a cambio de sobornos. Algunas de las víctimas contaron al medio citado que estos casos de abuso sexual contaron con el silencio del director de la cárcel.

Una de las fuentes le contó al medio de comunicación que: “A los reclusos que no accedían a sus pretensiones sexuales los hacía trasladar el INPEC (Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario)”. Y añadió, “el INPEC lo maneja a su antojo el señor Mattos, incluso el director de ese penal tenía amplio conocimiento de los constreñimientos que sufrían los internos a cambio de dinero”.

Uno de los reclusos compartió el video en el que se puede ver a quien sería Carlos Mattos pidiéndole acceder a actos sexuales. El clip fue revelado por La Nueva Prensa.

El medio, fundado por el periodista Gonzalo Guillén, aseguró que ha recibido otras denuncias contra Mattos por, al parecer, tener teléfonos de manera ilícita y mantener ocupadas las salas de visitas del penal atendiendo a sus amigos, subalternos, parientes, socios y abogados. La fuente de La Nueva Prensa agregó que: “La guardia de Cómbita nos prohibió denunciar estos hechos”.

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Mattos está condenado a nueve años de cárcel por el Juzgado 30 Penal del Circuito de Bogotá y a otros siete años por el Juzgado 11 Penal del Circuito de Bogotá, para un total de 16 años.

Siguiendo con la denuncia de La Nueva Prensa, Carlos Mattos llegó a la prisión de Cómbita procedente de La Picota, “en la que desplegó un programa personal de corrupción que le permitía salir a la calle durante días enteros para atender sus asuntos y para ello gozaba de camionetas y personal del INPEC que era su servidumbre”, señaló el medio de comunicación.

El pasado lunes 29 de agosto se conoció que Carlos Mattos fue trasladado a la cárcel de Barranquilla. De acuerdo con el INPEC, se autorizó el traslado por alegatos de la defensa del empresario sobre la delicada situación de salud que afronta Mattos en el piso térmico boyacense.

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Además, los abogados de Carlos Mattos señalaron que el condenado contaba con arraigo en el Atlántico y que por los hechos que fue puesto en prisión, no ameritaba una detención en un centro de máxima seguridad.

Carlos Mattos llegará al centro penitenciario en donde se encuentra Emilio Tapia, uno de los involucrados en el Carrusel de la Contratación en Bogotá y en la pérdida de más de 70.000 millones de pesos en el caso del MinTic con Centros Poblados.

Cabe señalar que Emilio Tapia, quien fue llevado a la cárcel Picaleña de Ibagué, logró ganar una acción de tutela e hizo que el INPEC lo trasladara a la cárcel Bosque de Barranquilla.

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